Néstor Soto confesó el femicidio: “Me cagué la vida y le cagué la vida a la familia de Catalina”

Néstor Soto (21) confesó haber cometido el crimen de Catalina Gutiérrez, el miércoles 17 de julio. En la indagatoria, ante el fiscal José Mana expuso su participación en el hecho por el que está imputado por homicidio agravado por alevosía y violencia de género.

Según trascendió no respondió preguntas y sólo se limitó a confesar y pedir perdón a la familia de la víctima. “Me cagué la vida y le cagué la vida a la familia de Catalina”, afirmó.

Sus abogados dispondrían que amplíe la declaración luego de tomar contacto con la investigación, contenida en el expediente. El abogado Gastón Shönfeld detalló que "el realizó una manifestación donde específicamente dijo que fue él. Fue breve, está muy arrepentido".

Con la indagatoria realizada, el fiscal Mana levantó el secreto de sumario. De este modo, la querella y los defensores podrán conocer el contenido de la investigación.

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Apenas comenzó la búsqueda de Catalina en la noche del miércoles 17 de julio y tras el hallazgo del cuerpo en las primeras horas del día siguiente, el fiscal dispuso allanamientos, secuestro de numerosos elementos, teléfonos, además de la autopsia de la joven que arrojó que murió por asfixia por estrangulamiento mecánico.

Uno de los detalles que inicialmente sembró sospechas sobre Soto fue el hallazgo de un anillo de Catalina en su casa. Se reconstruyó el trayecto, según los horarios, desde que ella salió de su casa para ir al Patio Olmos a jugar al bowling con su grupo de amigos. Nunca llegó a la cita y eso disparó las alertas y la búsqueda.

Cámaras de seguridad y domos permitieron trazar los recorridos, además del movimiento del celular de Catalina. En las primeras 24 horas el fiscal Mana consideró esclarecida la investigación e imputó y ordenó la detención de Soto.

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La imputación de femicidio podría ser cuestionada por la defensa, aunque el agravante de alevosía del homicidio, de por sí lo coloca ante la pena máxima de perpetua.

Amenazas. Después de realizar la declaración indagatoria, Soto solicitó la recepción de una denuncia. Dijo haber recibido amenazas en el establecimiento penitenciario de Bouwer, donde permanece detenido.