Un joven realizó fotomontaje con el rostro de compañeras y los subió a sitios porno

Tres semanas atrás, en una escuela pública de nuestra ciudad, estudiantes del último y penúltimo curso del secundario comenzaron a recibir en Instagram propuestas y sugerencias sexuales. No tardaron en develar lo que había sucedido porque compañeros varones del autor del hecho comunicaron a las autoridades que él les había hecho una confesión.

A través de montajes había pegado los rostros de compañeras de curso y también de 5°año con cuerpos desnudos de otras mujeres. Salvo una víctima, todas tienen 18 años, es decir que son mayores de edad. El hecho ocurrió en la Escuela Superior de Comercio Manuel Belgrano. 

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Con esas imágenes trucadas, creó perfiles en un sitio pornográfico llamado Poringa. Cada perfil tenía el nombre y apellido de las víctimas, lo que les generó un impacto y daño enorme. La situación conmocionó a los cursos involucrados.

El autor quien confesó lo sucedido también es mayor de edad. 

Las autoridades del establecimiento reunieron y contuvieron a las víctimas, luego convocaron a los padres del victimario, quien no volvió a cursar a la escuela. Sin embargo, trascendió que el establecimiento le permitirá rendir las materias del último año, en turnos diferentes al resto y acompañado por sus padres.

La noticia llegó a la justicia a partir de dos presentaciones, en un caso fue el padre de una de las adolescentes afectadas. La escuela no realizó ninguna denuncia, según informaron desde la fiscalía especializada a este diario.

Intervino el fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Juan Ávila Echenique. El magistrado consideró que debe intervenir la Unidad Judicial Contravencional de Violencia de género, donde giró, el 27 de junio, las actuaciones.

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Por las características del hecho no es competente para intervenir. Las fotos trucadas con desnudos están vinculadas a víctimas mayores de edad y la única imagen relacionada con una estudiante de 16 años no está asociada a desnudos.

Por esa razón no hay delito tipificado, pero son conductas reprochables en las que puede haber resoluciones de la justicia contravencional. Al cabo de una investigación se podrían determinar diferentes tipos de sanciones al acusado, como multa, arresto, trabajo comunitario; y la realización de un tratamiento para modificar su conducta.

Actualmente, el caso está a cargo de la ayudante fiscal Marina Victoria.

Los perfiles ya no se encuentran disponibles en el sitio porno; pero el daño residual existe porque las imágenes descargadas por clientes son irrecuperables. Eso habilita a las víctimas a interponer acciones civiles por los daños causados.