Una orientadora educacional evitó un femicidio cuando fue a la casa de uno de sus alumnos

Una socióloga que trabaja como orientadora vocacional en una escuela de Quilmes se acercó a una vivienda para asistir a un alumno que no se conectaba a las clases virtuales, cuando se topó con el intento de femicidio de la madre del niño por parte del padre.

Según informaron fuentes policiales, en una casa del partido bonaerense de Quilmes, ubicada en Garibaldi al 1.100, alrededor de las 10:00 del lunes 31 de mayo, Flavia Angelino se dirigió hacia la vivienda, preocupada por la ausencia del alumno en los zoom de clases virtuales.

Al llegar al lugar, la orientadora se encontró con gritos y pedidos de auxilio, y llegó a ser testigo del ataque a puñaladas del padre del alumno contra su esposa. En ese momento, llamó a la policía.

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El episodio terminó con la mujer de 39 años trasladada de urgencia al Hospital Zonal General de Agudos Dr. Isidoro Iriarte con una herida profunda en el pecho y cortes en el rostro, y según indicó Télam, ya se encuentra fuera de peligro.

Por su parte, el agresor, Gabriel Lezcano (40) intentó escapar, pero solo consiguió alejarse unos pocos metros, dado que fue interceptado por efectivos en el cruce de las calles Puccini y Alem. Ahora se encuentra a disposición de la Justicia.

En tanto, el menor y su hermano que también vive en la casa, fueron puestos en resguardo de familiares.

En el hecho tomó intervención la fiscal Karina Gallo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 4, del Departamento Judicial local.

El relato de la orientadora vocacional

Angelino, quien trabaja en la Escuela 9 de Quilmes, explicó al canal TN que, al llegar al lugar, "no hizo falta que golpeara las manos, porque salió la mamá gritando y el padre con un cuchillo en la mano".

"Con la ayuda de vecinos llamamos a un patrullero que andaba en la zona", contó la agente educativa, quien a su vez destacó que el hecho se produjo en un contexto en el que la violencia está "naturalizada".

Y añadió: "La mamá tenía la cara desfigurada, son cosas que no ocurren en un momento determinado, sino que son de largo tiempo".

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Al ser consultada sobre las razones por las cuales fue hasta ese domicilio, la orientadora vocacional mencionó que, ante "algunos emergentes del año pasado" se decidió con el equipo directivo del colegio ir a ver el contexto, el espacio socioambiental en cual el estudiante no se estaba haciendo presente en las clases virtuales.

"Son dos hermanos. El que llegué a buscar está en cuarto grado, estaba adentro. Esta es una situación que está naturalizada, donde no es extraño el golpe, no es extraña la agresión, de hecho, el grito (de la mujer) se escuchaba desde la esquina y no había nadie, salvo los vecinos en el momento en que se manifiesta en la puerta", contó.

Al concluir, señaló que tanto el alumno como su hermano "estaban bien" y no había evidencias de que hayan sido sometido a malos tratos.

CFT/FL