Crisis

Italia: pese al calor extremo, las playas están vacías por los elevados precios

En pleno verano italiano, las playas presentan un panorama inédito: el 90% de la costa registra menor afluencia que en 2024.

Playas en Italia Foto: Gentileza de X @EstRa14270

En pleno verano italiano, las playas presentan un panorama inédito: el 90% de la costa registra menor afluencia que en 2024. El fenómeno, que sorprende a operadores y autoridades, coincide con el Ferragosto —festividad del 15 de agosto— y tiene como principal causa el fuerte incremento de precios en hoteles y balnearios, sumado a la caída del poder adquisitivo de las familias.

Bernabó Bocca, presidente de Federalberghi, advirtió que la demanda interna disminuyó porque “los italianos intentan organizar vacaciones más cortas, alojarse en departamentos y reducir gastos en restaurantes”. Según el Sindicato Italiano de Balnearios, la afluencia cayó un 15% en promedio y hasta un 25% en regiones como Calabria y Emilia Romagna.

Balnearios caros, playas públicas saturadas

El Corriere della Sera señala que el problema es estructural: Italia tiene pocas spiagge libere (playas públicas) y la mayoría de la costa está ocupada por balnearios privados con tarifas cada vez más elevadas. Según Codacons, los precios subieron un 32,7% desde 2019, encareciendo un día de playa hasta niveles récord:

  • Gallipoli: 90 euros por sombrilla y dos reposeras.

  • Sabaudia: 45 euros.

  • Cerdeña exclusiva: hasta 120 euros.

  • Balneario Twiga (Forte dei Marmi): 1.500 euros la “carpa imperial” para diez personas.
    El actor Alessandro Gassman criticó abiertamente a los empresarios por “pasarse con los precios” y llamó a bajar tarifas para recuperar visitantes. Codacons respaldó sus dichos y calificó las quejas de los operadores como “lágrimas de cocodrilo”.

Turismo en retirada hacia la montaña

Las olas de calor extremas —con temperaturas récord previstas justo para Ferragosto— empujaron a muchos turistas hacia destinos de montaña como Ortisei, en las Dolomitas, donde se registraron largas filas para subir al teleférico.

La ministra de Turismo, Daniela Santanché, minimizó la situación y aseguró que Italia lideró la ocupación en el Mediterráneo en junio y julio. Sin embargo, datos de Agriturist muestran que también cayó la demanda en turismo rural, con estancias más cortas y un aumento de las vacaciones “toco y me voy”.
La temporada 2025 deja en claro que el modelo turístico italiano enfrenta un dilema: mantener precios altos para sostener ingresos o reducirlos para recuperar la masividad. Por ahora, las sombrillas vacías son la postal del verano.