La empresa petrolera del multimillonario ruso Mikhail Fridman acordó comprar una de las primeras compañías en perforar en México tras su apertura a la inversión extranjera, obteniendo así una gran parte de la superficie de exploración en el país.
A través de su unidad DEA Deutsche Erdoel AG, Fridman está comprando Sierra Oil & Gas a un grupo de propietarios de capital privado, según un comunicado de la compañía. La unidad DEA no reveló términos financieros, pero una persona familiarizada con las negociaciones estimó que el valor del acuerdo giraría alrededor de US$500 millones.
La transacción, que se conviertirá en la mayor adquisición del sector upstream en México desde la liberalización de su sector petrolero en 2013, indica que los grupos de energía siguen interesados a pesar de las políticas de izquierda contempladas por el nuevo presidente Andres Manuel Lopez Obrador.
"Estamos haciendo un gran compromiso con México", dijo en una entrevista telefónica John Browne, ex director de BP Plc, que ahora supervisa la unidad DEA. La compañía petrolera estatal del país "ha hecho un buen trabajo, pero aún es una parte subdesarrollada del mundo. Es algo nuevo".
Sierra, que cuenta con el respaldo de EnCap Investment LP, Riverstone Holdings y BlackRock Inc., tiene una participación del 40 por ciento del campo Zama, uno de los mayores descubrimientos de aguas someras en los últimos 20 años a nivel mundial. Se estima que contiene entre 400 millones y 800 millones de barriles de petróleo equivalente en volúmenes recuperables y la producción podría iniciar a partir de 2022, según el comunicado.
La adquisición marca otro paso en el trabajo de Fridman encaminado a crear una gran compañía independiente de petróleo y gas. Estableció en 2013 una empresa llamada LetterOne con su socio, German Khan, para invertir parte de los US$14.000 millones que obtuvieron de la venta de una participación en TNK-BP, una empresa conjunta rusa con BP.
En 2015, la unidad de LetterOne L1 Energy, presidida por Browne, tomó el control de la unidad DEA, cuya sede es en Alemania. El año pasado, Fridman acordó fusionar esta unidad con Wintershall AG, la unidad de petróleo y gas del gigante químico alemán BASF SE.
El acuerdo con Wintershall, el cual se espera concluir el próximo año, creará el mayor productor independiente de petróleo y gas de Europa. La compañía está considerando una oferta pública inicial cuanto antes, dijo Browne en una entrevista en septiembre. Las dos compañías tienen activos en Sudamérica, Europa y África del Norte.
Browne compartió que la compañía fusionada invertirá otros US$1.000 millones en México y realizará más transacciones, sin entrar en más detalles.
Cuando se realice la venta de Sierra, la unidad DEA tendrá participaciones en un bloque de producción en tierra y 10 bloques de exploración, incluido el campo Zama. La transacción está sujeta a las aprobaciones gubernamentales y se espera concluirla en el primer semestre de 2019.