La Administración Biden buscará cerrar la prisión militar estadounidense en la Bahía de Guantánamo antes de que finalice el mandato del presidente, dijo el viernes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki.
“Ese ciertamente es nuestro objetivo y nuestra intención”, dijo Psaki a los periodistas.
La instalación en Cuba, que solía albergar a sospechosos de terrorismo después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, se convirtió en un foco de críticas en la guerra contra el terrorismo del expresidente George W. Bush. Grupos de derechos humanos exigieron el cierre de la prisión en medio de informes de que los detenidos eran torturados y recluidos por razones cuestionables y sin pasar antes por un juicio.
La prisión alberga a unas 40 personas, aproximadamente 5% de la población máxima, después de que la Administración Obama redistribuyó a muchos de los detenidos en otros países.
Se espera que una revisión interinstitucional dé como resultado una orden ejecutiva que será firmada por el presidente Joe Biden en los próximos meses, según un informe de Reuters, que informó por primera vez sobre el esfuerzo.
Psaki dijo que el trabajo tomaría tiempo porque la nueva Administración necesita evaluar el “estado actual” del controvertido centro de detención.
El expresidente Barack Obama intentó cerrar la prisión, pero sus esfuerzos fueron obstaculizados por el Congreso, que insertó repetidamente disposiciones en los proyectos de ley de asignaciones de defensa que prohibían el cierre. En 2019, el expresidente Donald Trump dijo que estaba descontento con los costos operacionales de la prisión, por lo que estaba explorando opciones sobre qué hacer al respecto.