El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que su Gobierno está preparado para cualquier disturbio y expresó su preocupación por la ola de protestas en América del Sur. No obstante, el líder brasileño dijo que no anticipaba problemas en Brasil.
“Siempre tenemos que estar preparados para que no nos sorprendan las situaciones”, dijo a los medios en una ceremonia militar en Río de Janeiro el sábado. “No hay razón alguna, según entendemos, para que este movimiento venga aquí”.
Recientemente han estallado protestas en varios países de Latinoamérica, como Ecuador, Colombia, Bolivia o Chile. Las causas son distintas, pero el alcance de las protestas en todos los países y la rapidez con la que se han vuelto violentas han sorprendido a las autoridades.
Hasta ahora no ha habido grandes manifestaciones en Brasil, aunque la reciente liberación de la cárcel del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva podría dinamizar a la oposición.
En comentarios el sábado, Bolsonaro dijo que las protestas en algunos países, como Chile, habían ido demasiado lejos. “No son manifestaciones”, dijo. “Son actos de terrorismo”.
Selva amazónica
A preguntas sobre las políticas de su Gobierno respecto a la selva amazónica, Bolsonaro dijo que las críticas internacionales al aumento de los incendios forestales fueron parte de una “campaña insidiosa para atacar al Gobierno brasileño”.
El presidente también confirmó los informes de los medios nacionales de que su Gobierno está estudiando la posibilidad de legalizar la exportación de troncos de especies nativas de árboles amazónicos. En la actualidad, la práctica está prohibida, pero Bolsonaro dijo que creía que sería mejor regular la industria, en lugar de dejar que continúe clandestinamente.