El estancamiento político en Venezuela enmascara signos de que el fin del gobierno del presidente Nicolás Maduro se está acercando rápidamente, según una figura de la oposición. Julio Borges, exjefe de la Asamblea Nacional que vive en el exilio en Colombia desde principios del año pasado, dice que el cambio político está más cerca de lo que muchos esperan. "No veo la posibilidad de que Maduro permanezca en el poder para fin de año", asegura. "Hablando objetivamente, le es imposible superar todas las dificultades internas y externas que enfrenta".
La última crisis política de Venezuela comenzó en enero, cuando Juan Guaidó, el sucesor de Borges como líder de la Asamblea Nacional, se autoproclamó presidente. Mientras que Estados Unidos y otros 50 países han reconocido a Guaidó como jefe de estado de Venezuela, su movimiento de protesta se ha estancado en las últimas semanas mientras los manifestantes luchan por la supervivencia cotidiana en medio de apagones, arrestos de aliados clave y el continuo apoyo de los militares a Maduro.
Pero Borges, un asesor de Guaidó y su embajador en el Grupo de Lima, sostiene que las sanciones petroleras estadounidenses, la presión internacional y el colapso económico de Venezuela pronto expulsarán al régimen actual. "Están sucediendo muchas cosas invisibles", dijo en una entrevista en la oficina de Bloomberg en Nueva York. "Estamos empezando a ver algunos signos muy claros de división concreta o fracturas dentro del establecimiento político y las fuerzas armadas".
Descartó la posibilidad de discusiones con el régimen sobre una transición. "Maduro está absolutamente cerrado a las negociaciones y está siguiendo el "guion de Guerra Fría de Cuba que dice que solo tienen que resistir para poder permanecer en el poder", dijo.
Elecciones este año
En Caracas, la Asamblea Nacional aprobó una propuesta para cambiar las autoridades electorales del país y convocar elecciones generales dentro de siete a nueve meses, en un esfuerzo por mantener la presión sobre el régimen socialista del autócrata. Pero con el órgano legislativo despojado de su poder, el movimiento sigue siendo en gran parte simbólico.
Borges apoya la idea de elecciones sin Maduro. "Elecciones libres significa elecciones sin él en el poder", dijo. La oposición podrá organizar una votación este año que contaría con el apoyo internacional, incluso de parte de algunos de los patrocinadores del gobierno actual, agregó. "Estoy seguro de que Rusia y China estarán dispuestos a unirse a un proceso en el que se respetarán todos los intereses".
El surgimiento de Guaidó y una guía para la restauración democrática aún se consideran "la ruta más prometedora" para la transición política en la nación sudamericana, según un informe del Grupo de Trabajo sobre Venezuela del Diálogo Interamericano publicado este mes. "En la actualidad, sin embargo, parece lejos de inevitable", señala el informe.