Los bancos centrales latinoamericanos se apresuran a apoyar sus economías y estabilizar los mercados, en medio de la presión de unirse a Estados Unidos en anunciar medidas de emergencia para combatir la pandemia de coronavirus.
El lunes, los formuladores de política en BRASIL liberaron miles de millones de reales para crédito, anunciaron medidas para facilitar las negociaciones de deuda y dijeron que tienen "un amplio arsenal de herramientas que pueden usarse si es necesario" para apoyar la economía. Casi exactamente al mismo tiempo, CHILE anunciaba una reunión de política de emergencia y advertía sobre amenazas de solvencia a las empresas. PERÚ relajó los límites para el comercio de derivados de los bancos locales para permitir una mayor cobertura de divisas.
Eso se suma a una serie de medidas implementadas la semana pasada para estabilizar los mercados de divisas en toda la región, e incluso un recorte de tasas de interés de emergencia en Paraguay.
Los bancos centrales entran en acción menos de 24 horas después de que la Reserva Federal de Estados Unidos redujera su tasa de interés a casi cero, en medio de la carnicería del mercado. Por ahora, el costo social del brote en América Latina palidece en comparación con otras partes del mundo. Aún así, el golpe económico puede ser devastador, ya que el virus afecta la débil confianza empresarial y exacerba los problemas internos al tiempo que socava las rutas comerciales globales cruciales.
Chile se ha visto sacudido por cinco meses de disturbios sociales que no han mostrado signos de disminuir antes de un plebiscito de abril sobre una nueva constitución. Los esfuerzos de reforma económica se están desmoronando en Brasil, en medio de una renovada tensión entre el presidente Jair Bolsonaro y legisladores, y también una serie de desafíos, desde un alto desempleo hasta enormes déficits presupuestarios.
Medida preventiva
En un comunicado enviado por correo electrónico, el banco central de Chile dijo que la propagación del virus puede generar importantes problemas de venta y flujo de efectivo para las empresas, lo que, a su vez, podría perjudicar la actividad económica y el mercado laboral. Dijo que anunciará las decisiones de la reunión de emergencia al mediodía hora local en Santiago.
A fines de la semana pasada, las permutas mostraban apuestas a que el banco central de Chile entregará solo una reducción de un cuarto de punto a los costos crediticios en los próximos seis meses. Si bien la actividad económica ha sido golpeada por las protestas locales, un aumento de la inflación derivado en parte de una caída de la moneda ha puesto en duda las probabilidades de tasas más bajas.
Mientras tanto, el consejo monetario de Brasil, un grupo que incluye al banco central y al Ministerio de Economía, dio a las instituciones financieras una mayor flexibilidad para usar su capital, en una medida que aumentará su capacidad de otorgar préstamos en 637.000 millones de reales. También señaló la necesidad de que los bancos aumenten las provisiones para algunas operaciones de crédito realizadas en los próximos seis meses, según un comunicado.
Los economistas de UBS Group AG dicen que hay más por venir, ya que esperan que el banco central de Brasil reduzca las tasas en un punto porcentual completo, posiblemente incluso antes de su decisión programada regularmente el 18 de marzo. En una nota de investigación, UBS dijo que un empeoramiento de la economía global merece un "movimiento más agresivo y preventivo".
Los analistas en una encuesta semanal del banco central publicada el lunes recortaron su pronóstico de tasa clave para fin del año 2020 a 3,75%, en comparación con 4,25% anteriormente. También esperan que la economía brasileña crezca solo 1,68% este año, por debajo de su estimación anterior de 1,99%.