La economía estadounidense creció en el tercer trimestre al ritmo más rápido en casi dos años gracias a un aumento en el gasto de los consumidores.
El producto interno bruto se aceleró a una tasa anualizada de 4,9%, con lo que duplicó con creces el ritmo del segundo trimestre, según la estimación preliminar publicada el jueves por el Gobierno. El principal motor de crecimiento de la economía — el gasto personal— se elevó un 4%, también la mayor alza desde 2021.
Mientras tanto, un indicador de la inflación subyacente que es monitoreado atentamente se enfrió al ritmo más lento desde 2020.
La economía más grande del mundo se ha mantenido firme frente a los altos precios y el rápido aumento de los costos de endeudamiento, lo que ha eclipsado en reiteradas ocasiones las expectativas de los analistas y ha calmado los temores de recesión. El principal catalizador de esa resiliencia es la persistente solidez del mercado laboral, que continúa dando un impulso a la demanda de los hogares.
Traducido por Bárbara Briceño.
