Washington criticó a China y Rusia por promover una teoría conspirativa que señala que el Ejército estadounidense opera laboratorios biológicos en Ucrania, intensificando una disputa sobre los intentos de engañar a la población sobre la guerra en Europa.
“Tomamos nota de las falsas afirmaciones de Rusia sobre supuestos laboratorios de armas biológicas de Estados Unidos y el desarrollo de armas químicas en Ucrania”, dijo el jueves la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, en un comunicado. “También hemos visto a autoridades chinas hacerse eco de estas teorías de conspiración”.
Psaki calificó las acusaciones de “absurdas” y dijo que son el “tipo de operación de desinformación de los rusos que hemos visto en reiteradas ocasiones a lo largo de los años”. Psaki también expresó su preocupación de que Rusia pueda usar armas químicas en Ucrania.
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El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, respondió a la postura de la Casa Blanca en una conferencia de prensa regular el jueves en Pekín. “Es una vana ilusión disipar las preocupaciones con unas pocas palabras e irresponsable calificar de desinformación dichos recelos del mundo”, sostuvo.
Esta semana, China acusó sin pruebas al Ejército de los Estados Unidos de operar “peligrosos” laboratorios biológicos en Ucrania, afirmaciones que luego circularon ampliamente en los medios estatales en la segunda economía más grande del mundo.
Los comentarios replicaron las tácticas de distracción que usaron con anterioridad diplomáticos chinos cuando se les preguntó sobre los orígenes del COVID-19, y nuevamente hicieron referencia al laboratorio de la base militar estadounidense de Fort Detrick, en el estado de Maryland, que, según afirmó falsamente la Unión Soviética en la década de 1980, era la fuente del virus que causa el sida.
El Ministerio de Defensa de Gran Bretaña ha dicho que las acusaciones de Moscú de que Kiev está trabajando en armas biológicas o nucleares “probablemente se están amplificando como parte de una justificación retrospectiva” de la invasión.
Washington, detrás del conflicto
Cuando el martes presionaron a Victoria Nuland, subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos de EE.UU., durante una audiencia en el Senado sobre las teorías, ella dijo que Washington estaba trabajando con Kiev para evitar que los materiales de las instalaciones de investigación biológica de Ucrania cayeran en manos rusas.
En declaraciones al senador Marco Rubio, Nuland también planteó la posibilidad de que Rusia utilice armas biológicas en su invasión. “No tengo duda, senador, y es una clásica técnica rusa culpar al otro de lo que están planeando hacer ellos mismos”, indicó.
Desde 1991, una unidad del Departamento de Defensa de EE.UU. ha cooperado con antiguos Estados satélites de la Unión Soviética, incluida Ucrania, para encontrar y desmantelar armas de destrucción masiva que han quedado atrás. El Programa Cooperativo de Reducción de Amenazas de Nunn-Lugar apunta a “apoyar la cooperación militar y de defensa con el objetivo de prevenir la proliferación”, según el Centro para el Control y la No Proliferación de Armas, una organización estadounidense sin fines de lucro.
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Los ministerios de salud de EE.UU. y Ucrania firmaron un tratado en 2005 para evitar la proliferación de patógenos en instalaciones en Kiev, Leópolis, Odesa, entre otros, que pudieran utilizarse en armas biológicas.
Psaki dijo en el comunicado que EE.UU. cumple con los tratados internacionales sobre armas químicas y biológicas, “y no desarrolla ni posee ese tipo de armas en ninguna parte”.
RM cp
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