La Administración Biden anunció este miércoles que buscará degradar el estatus de Rusia como principal productor mundial de petróleo y gas natural, restringiendo las exportaciones de tecnología que le permiten desarrollar ambas industrias.
Estados Unidos y sus aliados “comparten un gran interés en degradar el estatus de Rusia como principal proveedor energético”, dijo la Casa Blanca en una hoja informativa que describe nuevos controles de exportación, incluidas restricciones a la venta de tecnología petrolera.
El planteamiento refleja el intento de la Administración de restringir las transacciones financieras y exportaciones a Rusia en una forma en la que maximice las consecuencias económicas para la federación, al tiempo que minimice el retroceso para los consumidores europeos y estadounidenses. EE.UU. y los países europeos excluyeron los pagos de energía de una prohibición cada vez mayor a los bancos rusos que utilizan el sistema de mensajería SWIFT para realizar transacciones financieras.
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“EE.UU. y nuestros aliados y socios no tienen un interés estratégico en reducir el suministro energético global, razón por la cual hemos excluido los pagos de energía de nuestras sanciones financieras”, dijo la Casa Blanca en su hoja informativa. Sin embargo, dijo, los nuevos controles de exportación afectarán a largo plazo el dominio energético de Rusia, “al tiempo que protegerán a los consumidores estadounidenses”.
Los funcionarios no especificaron de inmediato qué tipo de tecnología petrolera se vería afectada por la última ola de controles de exportación. Una hoja informativa de la Casa Blanca decía que los controles se enfocarían en “la refinación de petróleo, una fuente de ingresos clave” que apoya al ejército ruso, pero también describía “controles de exportación en equipos de extracción de petróleo y gas”.
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Representantes de la Casa Blanca y el Departamento de Comercio no respondieron de inmediato a las solicitudes de aclaración enviadas por correo electrónico.
La medida podría acelerar el éxodo de empresas energéticas de Rusia y tendría implicaciones para Halliburton Co., Baker Hughes Co., Schlumberger y otras empresas de servicios petroleros cuya tecnología se utiliza en pozos de petróleo y gas. Los representantes de esas empresas no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
En los últimos días, Exxon Mobil Corp., BP PLC, Shell Plc y otras compañías energéticas han anunciado su salida planificada de Rusia.