El mayor desafío para el próximo líder de Amazon.com Inc., Andy Jassy, puede provenir del negocio que mejor conoce: los servicios de computación en la nube.
A partir de la próxima semana, y por primera vez en los 27 años de historia del gigante de internet, alguien diferente a su exuberante fundador, Jeff Bezos, tomará las decisiones mientras él se hace a un lado para dar paso a Jassy, el actual jefe de Amazon Web Services. Jassy tiene la vara muy alta. Bezos generó valor por US$1,7 billones para los inversionistas al crear nuevos productos, incluidos Kindle y Alexa, y al estar a la vanguardia de los nuevos y vastos mercados en crecimiento en el comercio electrónico, los mercados en línea y los servicios en la nube. Sin embargo, antes de que Jassy pueda pensar en igualar la inventiva de su predecesor, tendrá preocupaciones más inmediatas.
La transferencia de poder llega en un momento crítico para Amazon. Se enfrenta a un creciente escrutinio por parte de los reguladores por sus prácticas comerciales. Al mismo tiempo, el Congreso está considerando una serie de leyes antimonopolio dirigidas a su vasto imperio. Y sus ventas de comercio electrónico se reducirán en relación con el ritmo vertiginoso observado durante la pandemia. No obstante, estos problemas son de poca importancia frente a una preocupación clave: ¿Puede Amazon Web Services mantener su liderazgo en el espacio de la computación en la nube? Sobre eso, no estoy tan segura.
Los analistas coinciden en que AWS es el negocio más importante y valioso de la empresa. Los altos márgenes de ganancia y las perspectivas de crecimiento de la unidad han sido el principal impulsor de la rentabilidad para los accionistas en los últimos años. Y la oportunidad futura para el negocio, que alquila capacidad de procesamiento a startups y empresas, sigue siendo enorme. Según Wedbush Securities, el gasto global en servicios en la nube se acercará a un US$1 billón durante la próxima década a medida que las empresas continúen trasladando el gasto a proveedores de servicios en la nube.
Pero hay indicios de que el dominio de Amazon está disminuyendo. Un informe de Gartner publicado el lunes reveló que la tasa de crecimiento de AWS fue significativamente inferior a la de sus pares el año pasado. El aumento de 29% de los ingresos por servicios de infraestructura en la nube de la unidad en 2020 se compara con una expansión de 41% para todo el mercado y un crecimiento de aproximadamente 60% para Azure de Microsoft Corp. y Google Cloud de Alphabet Inc., según el informe. (Nota: la definición de Gartner para los servicios de infraestructura en la nube puede no coincidir perfectamente con las definiciones corporativas).
Si bien AWS todavía tiene un importante liderazgo en los servicios en la nube, la competencia se está poniendo al día. La realidad es que el mercado se ha convertido en una carrera de tres jugadores. Hay razones por las que los clientes eligen optar por la competencia de AWS. Microsoft, por ejemplo, ofrece una mejor integración con los anticuados servidores de las oficinas, sumado a la relación integral para las corporaciones que ya utilizan su software empresarial. Google está ganando participación por su destreza en herramientas de inteligencia artificial y capacidades que utilizan tecnologías de software libre de código abierto, incluido Kubernetes, que permiten a las empresas expandir y administrar mejor las aplicaciones en la nube.
Los gigantes tecnológicos apuestan cada vez más fuerte en el mundo automotriz
Sin embargo, las mayores dificultades para Amazon pueden provenir de su creciente presencia competitiva en casi todos los sectores de la economía. Amazon ya es una potencia en el comercio minorista, el entretenimiento, la logística y la publicidad, y los expertos predicen que se expandirá a nuevas áreas, que incluyen atención médica, abarrotes y servicios financieros. Esto la contrapone cada vez más con sus clientes de servicios web corporativos y el sector empresarial de Estados Unidos se está dando cuenta. En abril, el director de información de Target Corp., Mike McNamara, dijo a Protocol que después de que Amazon compró la tienda de abarrotes Whole Foods hace cuatro años, la gran minorista decidió dejar la plataforma de Amazon. El ejecutivo confirmó que ya no usan AWS y que han reemplazado al proveedor con Google Cloud y Microsoft Azure. Sin duda, otras empresas seguirán los pasos de Target, lo que afectará las perspectivas de Amazon.
Bezos ha repetido frecuentemente la historia detrás del éxito de Amazon Web Services, citando el “milagro empresarial” de como sus pares no compitieron en el mercado de servicios en la nube durante siete años después de su lanzamiento y lo calificó como el mayor golpe de suerte en la historia empresarial. En cierto sentido, lo que hace es restregárselo en la cara a Microsoft, Google y otros por no haber comprendido oportunamente la importancia del nuevo mercado de la nube. Ahora, dado que la carrera es cada vez más estrecha entre los participantes del mercado de servicios en la nube y que aumenta la amenaza de los rivales, se necesitará mucho más que suerte para mantener la delantera. Pero eso debe resolverlo Jassy.
Mientras Bezos se prepara para volar al espacio, la gallina de los huevos de oro de Amazon se ve amenazada como nunca antes. Desafortunadamente para el nuevo director ejecutivo, la competencia está completamente alerta.
JFG
