Recep Tayyip Erdogan, el presidente de Turquía, recibió del emir de Catar un jet de lujo con un valor aproximado de US$500 millones. Erdogan confirmó haber recibido el obsequio al responder a críticas que cuestionaban si en realidad se había pagado con dinero de los contribuyentes. Turquía había manifestado su interés en comprar el avión cuando estaba a la venta por alrededor de US$500 millones, dijo Erdogan a los periodistas durante el fin de semana, según el diario Hürriyet. Pero cuando el gobernante de Catar se enteró, lo donó a la presidencia turca sin cargo, agregó el presidente turco.
Las primeras notas en los medios estatales turcos que informaron que el emir qatarí Tamim Bin Hamad Bin Al Thani obsequió el Boeing 747-8i a Turquía desencadenaron una ola de críticas, y un miembro del principal partido de oposición inició una investigación oficial sobre el tema. La legisladora Gamze Tascier le pidió al vicepresidente Fuat Oktay que revelara el precio del avión, que según ella suponía había sido pagado por el Gobierno. "El avión que mencionan está siendo pintado ahora", dijo Erdogan a los periodistas que volaban con él desde Azerbaiyán a Turquía durante el fin de semana. "Si Dios quiere, podremos volar en él cuando el trabajo esté terminado".
Cuestión de prestigio
Los gastos del líder turco son desde hace mucho blanco de ataques de los partidos de oposición, que dicen que Erdogan desperdició recursos valiosos en cosas como un nuevo palacio presidencial que tiene cuatro veces el tamaño de Versalles y flotas de vehículos de lujo. Erdogan dijo que el palacio pertenece al Gobierno, no a él, y que no deben considerarse los costos cuando se trata del prestigio del Estado turco.
El jet fue producido en 2012 y está diseñado para transportar a 76 pasajeros y 18 tripulantes, según un informe en thedrive.com redactado por Tyler Rogaway de Aviation Intel, que sigue los acontecimientos del sector. Tiene salones con ornamentos, camarotes e incluso su propio hospital, según el informe, que lo llamó "el jet privado más grande y caro del mundo".
El avión fue trasladado al aeropuerto Sabiha Gokcen de Estambul desde el aeropuerto Basel Mullhouse Freiburg en Francia el 11 de septiembre a través de una ruta de 8,5 horas que lo llevó por el Atlántico a las Azores, de regreso a Bruselas y luego a Estambul, según Rogoway.
No está claro qué se hará con el avión actual de Erdogan, un Airbus A-330-200 que recibió en 2014. Esa compra también generó controversia porque el avión fue encargado para la oficina del primer ministro, pero fue entregado a Erdogan inmediatamente después de que este asumió la presidencia. Daily Sabah citó a un experto en aviación que en aquel entonces estimó el costo de la aeronave en US$221 millones, con un gasto adicional de US$100 millones en una renovación personalizada.
Otra polémica relacionada con gastos lujosos estalló en 2015, cuando Erdogan respondió a un alboroto público por el Mercedes del jefe del directorado de asuntos religiosos, que valía US$385.000. Cuando el jefe del directorado, Mehmet Gormez, devolvió el vehículo a causa de la presión pública, Erdogan le regaló un automóvil similar de su propia flota y anunció públicamente que también le daría a Gormez un jet privado.
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