El presidente Recep Tayyip Erdogan tomó medidas para fortalecer alianzas en Europa y Medio Oriente, aliviando la presión sobre la lira, a medida que se profundizaba el conflicto entre Turquía y Estados Unidos.
Como parte de los esfuerzos para reunir apoyo y reforzar los mercados nacionales, el ministro de Finanzas turco, Berat Albayrak, sostuvo una conferencia telefónica con inversionistas internacionales. Erdogan tenía previsto hablar con el presidente francés, Emmanuel Macron, el jueves, un día después de dialogar con la canciller alemana, Angela Merkel, y que Qatar prometiera una inversión de US$15.000 millones.
La lira avanzaba por tercer día junto con las monedas de mercados emergentes, pese a que la Casa Blanca dijo que los nuevos aranceles sobre los productos turcos se mantendrían independientemente de si el pastor estadounidense Andrew Brunson, que se encuentra detenido en Turquía, es liberado. En otro elementó que contribuía a respaldar la moneda, por cuarto día el banco central no ofreció financiación a través de su tasa de recompra de una semana en 17,75 por ciento, obligando a los bancos a tomar la tasa a un día más alta de 19,95 por ciento.
"El problema más grande para los mercados es la constante politización de los problemas económicos y financieros", dijo Mohieddine Kronfol, director de inversiones en Dubái de renta fija para Medio Oriente y África del Norte y bonos sukuk en Franklin Templeton Investments.
La apertura de Erdogan a Europa sugiere que está preparado para reparar las tensiones causadas por los enfrentamientos diplomáticos del pasado – el año pasado acusó al gobierno de Merkel de participar en "prácticas nazis"– en un intento de capear la presión de EE.UU. El compromiso de Qatar, por otro lado, recompensa al presidente por respaldar al país rico en gas contra un boicot liderado por Arabia Saudita respaldado por el presidente estadounidense Donald Trump.
Qatar dijo que el paquete financiero se materializaría en forma de "proyectos, inversiones y depósitos". No dio detalles. La lira, una de las monedas con peores resultados del mundo este año, avanzaba un 2 por ciento a 5,8268 por dólar a las 11:45 a.m. en Estambul, reduciendo sus pérdidas para el año a cerca del 35 por ciento.
La difícil situación de Brunson ha dominado la estrategia de la administración Trump con su aliado de la OTAN, incluso luego que la disputa sacudiera los mercados de divisas. Brunson, que según las autoridades turcas estuvo vinculado a un fallido golpe de Estado en 2016, se encuentra bajo arresto domiciliario. Un tribunal de apelaciones debe decidir su destino esta semana. Una corte inferior rechazó la solicitud de su abogado para que lo libere y EE.UU. ha dicho que no negociará hasta que sea liberado.
Erdogan dijo que el enfrentamiento empujaría a Turquía a forjar otras alianzas. Poco después, su gobierno anunció que no cumpliría las sanciones de EE.UU. contra Irán, un proveedor clave de petróleo para Turquía.
Los inversores y analistas dicen que el apoyo de un país de la talla de Qatar ayudará a Turquía a ganar tiempo, pero no reemplaza la necesidad de acciones de política para contener la inflación de dos dígitos y una enorme deuda en moneda extranjera. Es por eso que la próxima presentación de Albayrak, el yerno de Erdogan, es tan crítica.
"Idealmente, necesitaría escuchar un plan fiscal más fundamentado", dijo en Bloomberg TV Esther Law, administradora de deuda de mercados emergentes de Amundi SA. "Denme algunos números. ¿Habrá alguna regla fiscal? ¿Cómo van a lograr, digamos, un déficit presupuestario no mucho peor que donde estamos sin comprometer demasiado el crecimiento? Esto es exactamente lo que estoy buscando".
El esfuerzo de Turquía de fortalecer sus alianzas políticas se sumó a las medidas adoptadas por las autoridades para apoyar el sistema bancario y frenar la venta a corto de la lira.
Ehsan Khoman, jefe de investigación y estrategia de la región de Oriente Medio y África del Norte en MUFG Bank, dijo que espera que el alivio de la moneda sea efímero, lo que llevará al banco central a aumentar los costos de endeudamiento "inminentemente para reconstruir la credibilidad".
