España considera prohibir las ventas de automóviles a diésel y gasolina a partir de 2040 para contrarrestar el cambio climático. Prohibir nuevos vehículos contaminantes es una de varias medidas previstas, en momentos en que el país busca alinear sus normativas con las de naciones como Gran Bretaña y Francia, según una nota informativa que se distribuyó a la prensa.
El proyecto de ley fijaría metas para 2030 y 2050 en materia de reducir emisiones y promover energías renovables y eficiencia energética. Es parte del esfuerzo español tendiente a consagrar sus obligaciones en virtud del Acuerdo de París. Debe reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20% respecto a los niveles de 1990 para 2030 y en un 90% de aquí a 2050, según el gobierno.
Una vez que la ley entre en vigencia, no se adjudicarán nuevas licencias de exploración petrolera, se prohibirá la fracturación hidráulica y ninguna prórroga de licenciamiento pasará de 2040, agregó. Con 84 diputados socialistas en el Parlamento de 350 escaños del país, el gobierno del presidente Pedro Sánchez necesita construir alianzas para aprobar proyectos de ley de gran magnitud.