La inflación mexicana se aceleró inesperadamente a principios de enero, lo que representa un nuevo desafío para los responsables de la política del banco central de cara a su próxima reunión.
Los precios al consumidor subieron un 7,94% en la primera quincena de enero respecto al mismo mes del año anterior, un aumento frente al 7,86% registrado a fines de diciembre, informó el martes el Instituto Nacional de Estadística. La lectura fue superior a la mediana de las estimaciones de los economistas encuestados por Bloomberg de un 7,85%.
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La inflación subyacente, que excluye elementos volátiles como los combustibles, se aceleró al 8,45%, por encima de la tasa anterior del 8,34% y de la mediana de las estimaciones del 8,32%. Este indicador, que es muy seguido en México, venía desacelerándose desde noviembre.
Los precios mexicanos se han visto favorecidos por la desaceleración de la inflación estadounidense, que bajó al 6,5% en diciembre, tras alcanzar un máximo del 9,1% en junio. La inflación quincenal mexicana aparentemente tocó techo en un 8,77% a fines de agosto.
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Los economistas esperan que el banco central, conocido como Banxico, reduzca el ritmo de sus subidas de tasas a un cuarto de punto cuando la junta se reúna en febrero, según una encuesta de Citibanamex publicada la semana pasada. El banco realizó un aumento de medio punto en diciembre y señaló que vendría al menos un incremento más, después de haber elevado los costos de endeudamiento en 650 puntos básicos en 13 reuniones a partir de junio de 2021.
El subgobernador Jonathan Heath declaró a Bloomberg News este mes que espera que el banco finalice su campaña de endurecimiento con la tasa de interés oficial entre el 10,75% y el 11,5%. Cree que la tasa, que ahora se ubica en un 10,5%, se mantendría en su nivel terminal durante al menos seis meses para garantizar que la inflación disminuya.
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El Banco de México redujo su campaña de endurecimiento en diciembre, subiendo las tasas 50 puntos básicos después de cuatro aumentos consecutivos de 75 puntos básicos, con la promesa de elevar los costos de endeudamiento en febrero. Se espera que el banco siga de cerca la próxima decisión de la Reserva Federal el 1 de febrero mientras los responsables políticos estadounidenses sugieren que se preparan a desacelerar su campaña de alzas desde el aumento de medio punto de diciembre.
La reunión de la junta de Banxico el 9 de febrero será la primera del nuevo subgobernador Omar Mejía Castelazo, una elección sorpresiva cuya nominación fue confirmada por los legisladores la semana pasada. Mejía, antiguo asesor de la junta de cinco miembros que trabajó en estrecha colaboración con la subgobernadora Galia Borja, reemplaza al moderado Gerardo Esquivel, que votó a favor de un ritmo de ajuste más lento que sus compañeros en las decisiones de política monetaria de 2022.
El Gobierno de México ha implementado medidas para frenar los aumentos de precios al consumidor, ampliando recientemente un pacto de inflación centrado en los productos básicos para garantizar que haya artículos asequibles en los estantes de los supermercados.