De acuerdo con una encuesta encargada por Bankrate.com, aproximadamente uno de cada cinco millennials asegura que la deuda por préstamos estudiantiles le está impidiendo comprar vivienda. Sin embargo, tal vez eso no sea tan malo, porque la mayoría de las compras de casas nuevas vienen con arrepentimientos.
Casi dos tercios de los millennials propietarios de vivienda (edades 23-38) sienten remordimientos por la compra de su casa. El arrepentimiento más común entre los millennials es que no anticiparon adecuadamente los costos mantenimiento inesperados.
“Las reparaciones y los costos mantenimiento son algo a lo que se enfrentan todos los propietarios de vivienda. Los consumidores deben reservar 1 por ciento del precio de compra de su hogar cada año en una cuenta de ahorro para cubrir estos gastos", explica la analista de Bankrate, Deborah Kearns.
Otras quejas incluyeron pagos hipotecarios superiores a lo que pueden manejar y viviendas demasiado pequeñas, demasiado grandes o en una zona mala.
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Para quienes no han comprado una casa, el costo es la barrera más grande para hacerlo. Alrededor de la mitad de los encuestados dijo que no tienen ingresos suficientes, mientras que 41 por ciento no puede pagar el anticipo y los costos cierre involucrados en la compra. Un tercio de los encuestados asegura que los precios de las casas son simplemente demasiado altos.
Un análisis Young Invincibles, una firma de defensa de adultos jóvenes, descubrió que, según datos de la Encuesta de Finanzas del Consumidor de la Reserva Federal de EE.UU., los graduados universitarios con deuda de préstamos estudiantiles tienen una riqueza neta negativa, lo que dificulta la propiedad de la vivienda.
Un informe separado de, Legal & General Group (L&G), una firma de servicios financieros con sede en Londres, encontró que "más de la mitad (51 por ciento) de los posibles propietarios menores de 35 años ahora espera recibir ayuda de familiares o amigos para comprar". Sin esta ayuda, muchos estadounidenses se pierden de la riqueza obtenida a través de la compra de una casa.
El estudio descubrió que uno de cada cinco compradores recibió un regalo o un préstamo sin intereses por un monto promedio de US$39.000 para ayudar con la compra; otra razón para ser amables con sus padres.