Los analistas están elevando las estimaciones de ganancias y dividendos para las empresas de mercados emergentes, poniendo fin a la caída bursátil más prolongada desde la crisis financiera.
Mientras el índice referencial MSCI de mercados emergentes hace su cuarto intento en el mismo número de meses por recuperarse de una liquidación de US$5,3 billones, la proyección promedio para las ganancias corporativas en los próximos 12 meses aumentó al nivel más alto desde el 10 de agosto. La proyección para los dividendos subió a un máximo de cuatro meses, según datos compilados por Bloomberg.
Las valoraciones cercanas a las más bajas desde el inicio de un rally de dos años en 2016 están empezando a atraer nuevamente a los inversionistas a las acciones de las naciones en desarrollo, que ingresaron a un mercado bajista este año en medio de una caída de 258 días calendario. Algunos administradores de dinero dicen que el impacto de una guerra comercial entre Estados Unidos y China, la agitación en economías más débiles como la de Turquía y el endurecimiento de la política de la Reserva Federal ya se ven reflejados en los precios del mercado.
“Muchas más noticias malas están descontadas en los mercados emergentes que otras clases de activos", dijo Steffen Reichold, administrador de fondos de Stone Harbor Investment Partners, en Nueva York. "Puede que estemos en un punto en que algo de eso se desarrolla con los activos estadounidenses con un rendimiento inferior".
A principios de este mes, el indicador MSCI de mercados emergentes alcanzó la valoración más barata desde la crisis financiera frente al índice S&P 500, con un descuento del 36 por ciento. Eso rompió una tendencia de cinco años, cuando las acciones de naciones en desarrollo se negociaban a un descuento no inferior a 33 por ciento. Las acciones estadounidenses cayeron en 15 de los últimos 20 días.
En las últimas dos semanas, las acciones de mercados emergentes han recuperado parte del terreno perdido, y se negociaban a un descuento de 34 por ciento. Administradoras de dinero como Reichold dicen que las pérdidas en los activos estadounidenses podrían ser una bendición para las naciones en desarrollo porque podrían detener la fuga de capitales a valores en dólares.
Mientras que las acciones de mercados emergentes han caído un 23 por ciento desde el máximo de enero, los fundamentos corporativos han ido mejorando. Por primera vez desde 2011, las empresas en el indicador MSCI están generando suficientes ganancias para cumplir con las estimaciones de los analistas proyectadas 12 meses antes.
Esto podría dar confianza a los administradores de dinero respecto a que un repunte en las proyecciones de ganancias y dividendos sustentará una recuperación en los precios del mercado.
“Los inversionistas ya redujeron sus riesgos en los mercados emergentes", dijo Reichold. "Estamos en un mejor punto de partida".
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