Elon Musk perdió un intento de deshacer su acuerdo de 2018 con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos que llevó a revisar sus tweets relacionados con Tesla Inc. por un funcionario interno al que se ha llamado el “Twitter sitter” del director ejecutivo.
Un juez de Nueva York también denegó el miércoles el intento de Musk de bloquear un requerimiento de la SEC que buscaba información sobre los controles de divulgación pública de Tesla.
El acuerdo por Twitter incluye una penalidad por rescisión de US$ 1.000 millones
Musk pidió el mes pasado al juez que pusiera fin a la supervisión de sus tweets, alegando que la SEC lo está acosando con demandas de investigación excesivamente amplias y que el acuerdo de 2018 viola su derecho a la libertad de expresión. Además, rechazó los argumentos de la agencia de que él aceptó libremente los límites y que la revisión de sus tweets por parte de un abogado de valores de la empresa no equivale a una regulación gubernamental de su discurso. Sin embargo, el juez dio la razón a la SEC.
“Musk no puede tratar ahora de retractarse del acuerdo al que accedió a sabiendas y de forma voluntaria simplemente lamentándose de que sintió que tenía que aceptarlo en ese momento pero que ahora, una vez que el fantasma del litigio es un recuerdo lejano y su empresa se ha convertido, en su opinión, en casi invencible, desearía no haberlo hecho”, dijo el juez de distrito Lewis Liman en Manhattan en una opinión escrita.
