El Servicio Secreto de Estados Unidos detectó e interceptó posibles dispositivos explosivos dirigidos a Barack Obama y Hillary Clinton, lo que generó una investigación criminal sobre los incidentes.
"Los paquetes fueron identificados inmediatamente como posibles dispositivos explosivos durante los procedimientos de rutina de revisión de correo y se manejaron adecuadamente como tales", informó el Servicio Secreto en un comunicado enviado por correo electrónico el miércoles. "Las personas bajo protección no recibieron los paquetes ni corrieron el riesgo de recibirlos".
También se informó de otros paquetes potencialmente peligrosos. CNN indicó que evacuó su oficina de Nueva York, citando información sobre un dispositivo sospechoso. Los reporteros de la cadena de cable transmitieron sus despachos desde la calle fuera del Time Warner Center en Manhattan.
Un dispositivo estaba dirigido a Hillary Clinton, la candidata presidencial demócrata de 2016, que vive con el expresidente Bill Clinton en Chappaqua, un suburbio ubicado a unos 64 kilómetros al norte de la ciudad de Nueva York. El otro paquete estaba dirigido al expresidente Obama en Washington.
"Condenamos los intentos de ataques violentos efectuados recientemente contra el presidente Obama, el presidente Clinton, la secretaria [de Estado Hillary] Clinton y otras figuras públicas", dijo en un comunicado la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders. "Estos actos terroristas son despreciables, y a los responsables se les aplicará todo el rigor de la ley".
La oficina del FBI en Nueva York indicó en un tuit que su Fuerza de Tarea Conjunta contra el Terrorismo "está colaborando con nuestros socios federales, estatales y locales para investigar" el paquete enviado a los Clinton.
Nick Merrill, portavoz de Hillary Clinton, dijo en un tuit que "nada llegó a ninguna casa".
Los incidentes se produjeron después de un hallazgo previo, cuando el lunes la policía "detonó de manera preventiva" una bomba casera encontrada en una residencia en los suburbios de Nueva York, propiedad del filántropo multimillonario y benefactor demócrata George Soros.
El Servicio Secreto toma medidas especiales para examinar el correo de las personalidades públicas que protege. Cada correo se somete a una revisión antes de ser entregada ante la eventualidad de posibles sustancias o dispositivos peligrosos, según el Departamento de Seguridad Nacional. Los paquetes sospechosos se ponen en aislamiento de forma rutinaria para realizar un examen más detenido en instalaciones que incluyen un laboratorio químico y biológico y un laboratorio forense.
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