La OPEP efectuará su muy esperada reunión a finales de esta semana en Viena, a pesar de las crecientes preocupaciones mundiales sobre los viajes debido al brote de coronavirus, dijo un delegado del grupo.
El gobierno de Austria informó anteriormente que es decisión de la OPEP si procede con la reunión, aunque recomendó que agrupación considere las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, a medida que el virus obliga a la cancelación de eventos en todo el mundo.
Los ministros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, incluida Rusia, se reunirán en la capital austriaca para discutir si se necesitan recortes de producción adicionales para compensar la severa contracción de la demanda desencadenada por el brote. La semana pasada, los precios del crudo experimentaron la mayor caída desde la crisis financiera mundial de 2008 y Arabia Saudita ha estado presionando al grupo para dar una respuesta.
Depende de las organizaciones internacionales en Viena sopesar los riesgos de celebrar conferencias durante el brote, dijo el lunes un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Austria. Si bien la propia Austria solo ha informado de unos pocos casos de la enfermedad en personas que regresaban de países extranjeros, uno de los miembros más importantes de la OPEP, Irán, está experimentando un brote severo que ha infectado a funcionarios del gobierno y provocó restricciones en los viajes internacionales.
El número de casos de coronavirus en la República Islámica repuntó en aproximadamente un 50% a 1.501, y el número de muertes aumentó de 12 a 66, dijo el Ministerio de Salud del país. Un miembro del consejo que asesora al líder supremo de Irán murió de coronavirus, informó la agencia de noticias semioficial Tasnim.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Austria citó la recomendación del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, que los grupos deberían considerar acortar las reuniones, dotarlas de personal con diplomáticos locales, cancelar eventos paralelos o retrasar sus conferencias por completo. La reunión de la OPEP en Viena reunirá importantes delegaciones de 23 países, desde Medio Oriente a América Latina, y de África subsahariana a Asia, además de cientos de periodistas y consultores.
En Estados Unidos, una de las reuniones de la industria energética más grandes e importantes del mundo, la conferencia CERAWeek organizada por IHS Markit Ltd. que debía comenzar el 9 de marzo, fue cancelada el domingo en medio de crecientes preocupaciones sobre el brote de coronavirus. Los directores ejecutivos de Saudi Aramco, BP Plc y Total SA estaban entre los participantes del programa de cinco días del evento.
La OPEP había analizado la posibilidad de reemplazar su reunión en Viena con una teleconferencia, dijeron los delegados. El grupo está en contacto permanente con las autoridades austriacas sobre el virus y ha distribuido pautas de salud al personal y a los delegados visitantes, según el secretario general de la OPEP, Mohammad Barkindo.
Esta semana, entre otras organizaciones internacionales con sede en Viena, se celebró la reunión de la Comisión de Estupefacientes, que incluyó delegaciones de Irán y China. Uno de los congresos médicos más grandes de Europa anunció que se realizará después de consultar con las autoridades sanitarias de la capital austriaca.
