El Producto Bruto Interno (PBI) de México creció un 0,8% respecto a los tres meses anteriores. Esta expansión se sitúa ligeramente por por debajo de la estimación media del 1% de los economistas encuestados por Bloomberg y de la tasa preliminar del 0,9% informada el mes pasado.
Inteligencia Artificial: se estima que generará el 7% del PBI mundial
A pesar del beneficio conseguido por la fortaleza de su comercio con Estados Unidos y de su propio robusto mercado laboral, el PBI mexicano no alcanzó las expectativas de los economistas.
Frente al mismo período del año anterior, el PIB creció un 3,6%, por debajo de la lectura preliminar del 3,7%, según las cifras finales publicadas el martes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México.
“Esperamos que la sólida demanda interna impulse la actividad en el futuro, aunque el crecimiento podría ser mucho mayor con mejores políticas gubernamentales. El principal riesgo es una posible recesión en EE.UU.”, escribió Felipe Hernández, de Bloomberg Economics, en una nota de investigación antes de que se publicara el informe.
El elevado crecimiento del empleo y de los salarios ha puesto más dinero en circulación. La segunda economía de América Latina también se ha visto favorecida por la demanda estadounidense de sus exportaciones, y el país registró un superávit comercial en junio, en medio de una caída del valor de las importaciones de petróleo. La recuperación del sector de los servicios tras la caída registrada durante la pandemia también ha sido un factor favorable.
El gasto durante el verano, en vacaciones y restaurantes —ya que los clientes contribuyen a impulsar la demanda interna— también fue un elemento clave del aumento sostenido de los precios al consumidor en los últimos meses. La inflación general se situó en el 4,67% a principios de agosto, según la medición más reciente del Gobierno. La cifra es inferior al máximo del ciclo del 8,77% registrado un año antes, muy por encima del objetivo del banco central del 3%, más o menos un punto porcentual.
Según una encuesta de Citi publicada la semana pasada, los analistas esperan que la economía crezca un 2,9% este año, frente al 2% previsto a principios de junio. Los economistas encuestados por Bloomberg en agosto prevén que la economía mexicana crezca un 3% a finales de año.
“La actividad económica en México ha sido mucho mejor de lo esperado este año”, dijo Carlos Capistrán, jefe de economía para México y Canadá de Bank of America, antes de que se publicaran los datos revisados. “Hay tres razones principales: EE.UU. también ha sorprendido al alza de forma importante, el nearshoring y la construcción pública”.
La baja en el petróleo podría afectar el PBI de los países desarrollados
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha tratado de terminar proyectos que incluyen un tren a través del sureste de México y una importante refinería antes de que termine su mandato en 2024, lo que explica en parte el impulso de la construcción en los últimos meses. Se espera que el candidato presidencial no oficial de su partido se anuncie el 6 de septiembre.
La inversión de empresas en México para seguir vendiendo a los mercados norteamericanos, el proceso conocido como nearshoring, también ha apoyado las expectativas de crecimiento sostenido. Los problemas de infraestructura y el estrecho mercado laboral son preocupaciones para algunos, lo que, según los economistas, ha significado que no todas las firmas que están considerando México concretarán sus acuerdos.
El país recibió US$29.000 millones en inversión extranjera directa en la primera mitad de 2023, y gran parte de ese dinero provino de EE.UU., país que además es el principal comprador de productos mexicanos.