El senador republicano Lindsey Graham criticó al príncipe heredero de Arabia Saudita calificándolo de "bola de demolición" y de personaje "tóxico" que, según dijo, fue directamente responsable de la desaparición y posible asesinato del periodista Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Estambul. "He sido su mayor defensor en el pleno del Senado de Estados Unidos", dijo el martes Graham, republicano de Carolina del Sur, en "Fox and Friends" sobre los lideres saudíes. "Este tipo es una bola de demolición. No ocurre nada en Arabia Saudita sin que MBS lo sepa”, agregó, usando un acrónimo para el príncipe heredero Mohammed bin Salman.
Los comentarios de Graham –influyente partidario de línea dura de política exterior en el Congreso que asesora con frecuencia al presidente Donald Trump– fueron unas de las palabras más duras que se haya hecho en público de parte de un republicano de alto rango sobre la desaparición de Khashoggi. Dijo que apoyaría los esfuerzos para "sancionar fuertemente a Arabia Saudita". "Hizo que asesinaran a este tipo en un consulado en Turquía y esperar que lo pasemos por alto; me siento usado y abusado", continuó Graham. "Siempre estuve en el pleno defendiendo a Arabia Saudita porque es un buen aliado. Hay una diferencia entre un país y una persona. El personaje de MBS es para mí tóxico; nunca podrá ser líder mundial en el escenario internacional".
Los comentarios de Graham ponen de relieve el rápido aumento de la presión en el Congreso para que la administración tome medidas contra Arabia Saudita. El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, calificó el tema de Khashoggi de "extremadamente preocupante" y dijo que es probable algún tipo de medida después de que se haga pública nueva información. "Claramente, debemos averiguar qué sucedió antes de decidir qué medida se debe tomar", dijo McConnell el martes en una entrevista con Bloomberg News. "No puedo imaginar que, si sucedió lo que pensamos, no tomemos ninguna medida".