El síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico, o MIS-C, es una condición rara pero terrible que lleva a una gran cantidad de niños a la unidad de cuidados intensivos. Se cree que se deriva de una infección previa de covid-19, generalmente en niños sanos que no mostraron ningún síntoma del virus.
Aunque los estadounidenses más jóvenes soportan una carga mayor que antes cuando se trata de covid-19, por varios meses de disponibilidad de vacunas para adultos mayores, queda claro que se desconoce el alcance completo del MIS-C en niños.
Texas Children’s Hospital, uno de los más de una docena de centros pediátricos en el estado, ha atendido a más de 150 pacientes jóvenes con MIS-C en el último año, dijo Lara Shekerdemian, directora de cuidados críticos del hospital. No obstante, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) han registrado menos de 100 casos en todo Texas.
Pediatras investigan si el Covid-19 se está volviendo más grave en niños
Los CDC publican un recuento de casos de MIS-C reportados por los departamentos de salud estatales que actualiza mensualmente. Su recuento más reciente muestra 3.742 casos de MIS-C en Estados Unidos. Esa cifra es probablemente baja.
La condición se descubrió un par de meses después del inicio de la pandemia y los informes estatales son voluntarios, lo que significa que pueden ser lentos o, a veces, no ocurrir en absoluto. Eso es muy diferente del minucioso seguimiento diario de los CDC a los casos de covid-19, que han bajado en las últimas semanas. La falta de datos podría resultar inquietante para los padres, particularmente aquellos cuyos hijos son menores de 12 años y aún no son elegibles para las vacunas. La mayoría de los casos de MIS-C han aparecido en niños de 5 a 14 años, con una edad media de 9 años, según los CDC.Si bien algunos departamentos de salud han reportado totales que aparecen en línea con los datos de los CDC, grandes estados como Nueva York, California y Texas muestran discrepancias.
Los CDC no ven los datos en su sitio web como un recuento completo, dijo la portavoz Jade Fulce. En cambio, la agencia lo usa para comprender las tendencias.
Los CDC han relacionado 35 muertes con la afección, pero, aunque la mayoría de los niños se recuperan, puede afectar muchas partes del cuerpo, incluidos el corazón, los pulmones, el cerebro y el sistema gastrointestinal. Y el impacto a largo plazo aún se desconoce.