Pedro Lynn, secretario gremial de ATE Capital, se refirió en el programa “Soy casta” a la crítica situación que atraviesa el Hospital Garrahan y cuestionó la respuesta del Gobierno basada en un bono. Lynn explicó que si bien los residentes lograron una mayor visibilidad en su reclamo, el conflicto abarca a todos los trabajadores del hospital: “Hay una necesidad transversal en todos los hospitales nacionales, pero también hay particularidades en el Garrahan, que es un organismo de máxima excelencia", expresó.
En este sentido, subrayó que “si el problema de los residentes se soluciona, queda el 90% de los trabajadores con sus propios reclamos. La lucha de los compañeros no se va a fragmentar", en alusión al anuncio que hizo el domingo el ministro de Salud Mario Lugones por medio de un posteo en la red social X y que, de oficializarse, alcanzaría únicamente al 10% de los trabajadores del nosocomio. El funcionario fue imputado por el fiscal federal Guillermo Marijuan por presuntas irregularidades en la administración del hospital y posible malversación de fondos.
El referente sindical también anunció que este miércoles ATE Capital participará de la marcha “Ni una menos” junto a jubilados y organizaciones feministas, como parte de una estrategia de unidad frente al ajuste. Además, informó que este martes se llevará a cabo una asamblea en el hospital para definir los pasos a seguir.
Por su parte, Felicitas Bonavitta denunció una campaña de desinformación en redes sociales y desde el propio Estado: “En la red social X, la cuenta @ResGarrahanReal es falsa y publica información que no es real", precisó, y completó: "Incluso el Gobierno difundió cifras de trabajadores administrativos que no son correctas”.
En respuesta, Lynn subrayó la falta de conocimiento de las autoridades sobre la situación real del sistema de salud: “Todos los hospitales están recibiendo ajustes. No alcanzan los insumos, los salarios no cubren lo básico, hay despidos y muchas renuncias. Los profesionales con más capacidad se van al sector privado porque allí encuentran mejores condiciones”, explicó.
La preocupación gremial no es nueva, pero sí se agudiza frente al deterioro sostenido de las condiciones laborales y el vaciamiento progresivo de los hospitales públicos, en un contexto donde la precarización avanza y las respuestas oficiales siguen siendo parciales y comunicadas por vías no formales.
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