La semana que inició después de las PASO se vió con un fuerte grado de repercusión debido a la victoria de Javier Milei y Patricia Bullrich en la interna de Juntos por el Cambio. Con el fin de ver el impacto de las elecciones en la economía, este medio se comunicó con el economista Leandro Mora Alfonsín.
Según Leandro Mora Alfonsín, “la semana pasada fue una semana de shock por el resultado de las PASO”, dado que, “las dos alternativas opositoras que se impusieron, tanto Javier Milei como Patricia Bullrich, presentan propuestas como la dolarización o el eventual levantamiento del cepo”.
Y agregó: “Por ende, la percepción que tienen los agentes a la hora de tomar decisiones de inversión o de dolarización de carteras, se acelera”.
El resultado de las PASO fue una respuesta al deterioro del salario real
“Estamos en un contexto de erosión de ingresos, en donde el voto ha demostrado eso”, comentó Alfonsín. “El voto ha sido una respuesta al deterioro que el salario real ha tenido desde el 2018 en adelante y en función de eso, cuando te va a convalidar la demanda de aumentos es algo que se pone a prueba en función de los propios aumentos”, agregó.
Posteriormente, el economista señaló que gane quien gane en diciembre, “va a tener que encarar una lógica de estabilización con la gente de adentro”. A su vez, remarcó que debe ser cuidando los costos de una devaluación y de un aumento de tarifas: “La corrección de precios relativos tiene que ser cuidando ingresos. Lo cierto es que hoy la soga está muy corta tanto en la tensión de la sociedad como en la tensión de las cadenas de suministros y la capacidad productiva de las empresas”.
La inflación: una costumbre argentina
“Aun con aumentos en la tasa de interés sigue por debajo de la inflación, con lo cual, el comportamiento de la cadena de pagos tiene que ver también con la corrección que va teniendo el valor de la moneda”, sostuvo el entrevistado. En relación a este tema, recalcó que todas las industrias tienen su propia estrategia de cobertura y que en la actualidad, el argentino se acostumbró a manejarse en una economía inflacionaria instaurada hace 20 años.
