En la Argentina se nota la falta de ingenieros y técnicos. En el caso de la ingeniería está el problema salarial, los profesionales van al exterior y cuadruplican sus ingresos. Las carreras técnicas de la salud también se encuentran ante un problema deficitario. En este complicado contexto, nos comunicamos con Juan Antonio Lázara, profesor titular en la UADE.
Demanda estudiantil vs demanda empresarial
“Hay un problema histórico en la Argentina y es que los chicos eligen carreras que no son lo que necesitan las empresas”, comentó Antonio Lázara sobre la decisión que toman los alumnos sobre qué estudiar. “Si hablamos en economía, entre oferta y demanda, la demanda laboral no coincide con la demanda estudiantil y, por lo tanto, hay un desfasaje”,añadió.
Para Lázara, los chicos que piensan estudiar una profesión “prefieren siempre las ciencias sociales y todo lo que tiene que ver con carreras blandas”. Las carreras “duras”, es decir las técnicas y las ingenierías, “son lo que buscan las empresas y no son lo que buscan los alumnos”, por lo cual, “tenes un problema por el lado de la demanda”.
Por el lado de la oferta, el profesor que enseña historia del arte en UADE sostuvo que, “las universidades suelen ofertar carreras blandas porque están atendiendo la demanda estudiantil y no la demanda de las empresas, por lo cual, hay un desfase también en la oferta”. “Crear una carrera de ingeniería o una carrera técnica de la salud para una universidad es un esfuerzo económico mucho mayor que crear una de abogacía”, remarcó el entrevistado, que luego continuó: “Las universidades se van a volcar a lo que le interesa al estudiante y a lo que le cueste menos”.
El presupuesto de una universidad pública y privada
Posteriormente, Lázara diferenció las universidades privadas de las públicas. Con respecto a la universidad privada, dijo que “se busca que cierren los números”. En el ámbito público hay otro problema, “está la pelea por los presupuestos, es fácil crear una universidad pública pero el dinero tiene que salir de algún lado. Entonces en los últimos años, tuvimos una enorme cantidad de nuevas universidades públicas que para justificar sus presupuestos necesitan alumnos”.
A modo de cierre, frente a la idea de acortar carreras para atraer alumnos, el profesor dio su visión negativa: “Una universidad no está para cortar carreras sino que está para dar herramientas teóricas para que después un profesional se pueda manejar en distintos contextos”.