Sandra Arroyo Salgado participó de una conferencia de prensa organizada por los estudiantes de Periodismo de la Escuela de Comunicación del Grupo Perfil, donde se refirió a las últimas declaraciones del presidente Alberto Fernández sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman. “Fueron desafortunadas las declaraciones de Alberto Fernández sobre Nisman. Las declaraciones del Presidente sobre la muerte de Nisman afectan su credibilidad, su investidura y el respeto que la sociedad puede tener a sus declaraciones”.
La jueza federal de San Isidro también se expresó sobre la aplicación del impuesto a las ganancias al poder judicial. "Considero que como tantos otros ciudadanos hay impuestos que debieran afrontar también los funcionarios y magistrados. Si abrimos este debate deberían considerarse distintos aspectos jurídicos como el postulado constitucional que en el artículo 110 contempla la intangibilidad de las remuneraciones de los jueces", declaró Arroyo Salgado en el Ciclo de Entrevistas a cargo de Rodrigo Lloret, director de Perfil Educación.
—En una entrevista reciente, el presidente Alberto Fernández abordaba el alegato del fiscal Diego Luciani en la causa Vialidad y mencionó al fiscal Alberto Nisman. ¿Por qué cree que Fernández habló sobre Nisman?
—Deberían preguntárselo a él. Fueron desafortunadas las declaraciones de Alberto Fernández sobre Nisman. Las declaraciones del Presidente sobre la muerte de Nisman afectan su credibilidad, su investidura y el respeto que la sociedad puede tener a sus declaraciones. Y no digamos ya en un tema como fue el asesinato de Nisman, si no también para el presente y el futuro. En la serie de Netflix sobre Nisman, que no la pude ver en su integridad, si mal no recuerdo, hay una parte de declaraciones de Alberto Fernández donde habla de asesinato. donde por ese entonces pensaba otra cosa. Pero bueno, es un ser humano como somos todos, y todos cometemos errores.
—La escena donde hallaron sin vida a Nisman no fue protegida tras la muerte del fiscal. ¿Cree que hubo una intencionalidad política o fue un simple error?
—Conociendo el funcionamiento de las fuerzas de seguridad, del Ministerio Público Fiscal y del Poder Judicial, ahí se mezcló la incompetencia, la falta de capacidad, de conocimiento y de capacitación en cuanto a manejar ciertas situaciones frente a un escenario muy difícil. No nos olvidemos que Nisman, cuatro días antes había hecho una denuncia penal contra la máxima autoridad del Poder Ejecutivo. Y el día de su hallazgo iba a dar cuenta de la denuncia ante el Congreso de la Nación. No podemos desconocer que el secretario de Seguridad estaba presente en el lugar junto al jefe de la División de Homicidios de la Policía Federal, y que las fuerzas de seguridad dependen jerárquicamente del poder Ejecutivo.
—¿Alguna vez fue víctima de desinformación por parte de los medios?
—Lo que más me ha afectado en lo personal fueron esos ataques, amenazas e intimidaciones públicas de funcionarios, magistrados y del periodismo, que sufrieron mis hijas siendo menores de edad. Durante todo el 2015 mis hijas fueron las principales víctimas, después de su papá, de una cantidad de ataques y mensajes mafiosos. Han hecho seguimientos a lugares de privacidad familiar tomando fotos de forma subrepticia que provocaba en mis hijas miedo, dolor y no poder procesar el duelo. Todos saben el dolor que eso acarrea, y más que a una cierta edad es como que uno tiene menos herramientas para defenderse y afrontar esa situación.
—¿Qué piensa sobre la posibilidad de que los jueces deban pagar impuesto a las ganancias?
—Es un tema que ya fue tratado y debatido con motivo de la ley sancionada durante el gobierno del ex presidente Macri, cuando se determinó que a partir de la entrada en vigencia de esta ley los nuevos magistrados paguen ganancias. Considero que como tantos otros ciudadanos hay impuestos que debieran afrontar también los funcionarios y magistrados. Si abrimos este debate deberían considerarse distintos aspectos jurídicos como el postulado constitucional que en el artículo 110 contempla la intangibilidad de las remuneraciones de los jueces. Plantearnos las reducciones de remuneraciones que debieran hacerse a quienes integran directorios de bancos nacionales, provinciales, municipales y que son muy superiores a la de los magistrados. Y contemplar a los colegas que han asumido con posterioridad a la entrada en vigencia de esa ley del gobierno de Macri del 2017, que pagan el impuesto a las ganancias.
—Quienes criticaron esta iniciativa sostienen que hubo un intento del kirchnerismo de avanzar sobre la justicia. ¿Está de acuerdo con esa versión?
—No tengo una opinión al respecto, en definitiva, la ley del presupuesto la vota y la sanciona el poder legislativo. A todo miembro del poder judicial sea empleado, funcionario o magistrado le está vedado el ejercicio de cualquier otra actividad, que es también un tema a tener en cuenta vinculado a la pregunta anterior. Hay una incompatibilidad en lo que es la función judicial que alcanza a todo tipo de actividad, de tipo comercial, empresarial, solamente se puede ejercer la actividad académica. Cuestión que no afecta por ejemplo a los legisladores, ellos pueden continuar desarrollando una actividad privada. Llevó 32 años en la Justicia, no me corresponde hacer este tipo de especulaciones, no estoy ni de uno ni de otro lado de la supuesta grieta que para mi no es tan grieta como se quiere presentar a la sociedad.
—Agradecemos su participación en este Ciclo de Entrevistas y le damos la posibilidad de cerrar con un comentario final que quiera hacer.
—La exposición mediática me ha costado mucho, creo que los magistrados no estamos preparados, no recibimos capacitación para estos escenarios a los que a veces nos empuja la circunstancia del trabajo o como es mi caso de la vida personal y familiar. Hoy la comunicación llega de otro modo a través de las redes, es muy importante cómo se comunica, la claridad, pero lo más importante es no olvidar aquellos valores éticos, porque las tentaciones pueden aparecer por un mayor rating o por un mayor ingreso. La falta de empatía o de consideración con el dolor de las personas que están detrás de una noticia pueden ser un arma letal para esas personas, y más aún cuando son las víctimas de un hecho que están ahí porque el Estado ya les falló.
Por María Laura Álvarez, Julieta Morales y Martin De los Santos
Estudiantes de Periodismo de Perfil Educación
Escuela de Comunicación
