La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) prevé que para el año 2040 haya una colonia humana estable en Marte. El organismo, que reúne a más de 20 países europeos, presentó esta semana un informe en el que imagina a los humanos habitando “oasis espaciales” dentro de 15 años, como parte de una expansión interplanetaria considerada “necesaria” para el futuro de la humanidad.
En el documento “Tecnología 2040: Una visión para la Agencia Espacial Europea”, la ESA proyecta avances que van mucho más allá de la órbita terrestre. Según su visión, vivir en Marte no será solo una opción para la investigación científica, sino una solución a largo plazo que abrirá nuevos mercados, desarrollará tecnologías y permitirá explorar recursos aún desconocidos del sistema solar.
Las imágenes difundidas por la agencia muestran enormes cúpulas blancas construidas con materiales inteligentes que repelen la radiación y permiten la vida humana en el planeta rojo. Los astronautas podrán dormir, comer y trabajar dentro de estas estructuras, sin depender de constantes envíos desde la Tierra.
Una nueva investigación descubrió qué son las líneas oscuras del planeta Marte
Aunque a día de hoy parezca ciencia ficción, la ESA sostiene que ya existen las tecnologías clave para avanzar en ese camino y que, en solo 15 años, las primeras colonias humanas podrían estar activas en Marte y la Luna. "Para 2040, prevemos una presencia europea resiliente en todas las órbitas de la Tierra y el sistema solar", aseguran en el informe.
Y agregan: "Expandirse en el espacio no es un lujo sino una necesidad y el espacio ya no es una frontera: es un territorio. Desbloquea recursos desconocidos que abren nuevos mercados y posibilitan avances científicos".
¿Cómo los humanos llegarían a Marte?
El viaje a Marte sigue siendo uno de los desafíos más complejos de la exploración espacial. Aunque ningún ser humano ha llegado más lejos de la Tierra que los 400.000 kilómetros alcanzados por la misión Apolo 13 en 1970, la ESA plantea que es necesario avanzar hacia destinos más lejanos.
El informe subraya que Marte está, en promedio, a 200 millones de kilómetros de la Tierra, por lo que llegar hasta allí requiere naves capaces de mantener la vida humana durante meses. La nave Starship de SpaceX, diseñada para trayectos interplanetarios, aparece como una de las candidatas más avanzadas para hacerlo posible, aunque todavía está en fase de pruebas.

Según la ESA, será necesario desarrollar una infraestructura permanente que reduzca la dependencia de la Tierra, para evitar estos extensos viajes. Por este motivo, señalan la necesidad de incluir vehículos autónomos, inteligencia artificial para la toma de decisiones en tiempo real y estructuras ensambladas directamente en el espacio o sobre la superficie marciana.
La agencia también prevé el uso de robots exploradores, como el rover Perseverance, que actuarán como avanzada en el planeta, evitando riesgos humanos como la fatiga, la exposición a radiación y la alteración por las tormentas de polvo marcianas.
A medida que se construyan las primeras bases, se podrán explotar materiales locales, e incluso extraer minerales de cometas y asteroides para fabricar partes de las estaciones. Con ello, se impulsará lo que denominan una "economía espacial circular y sostenible".
Así serían los “oasis espaciales” donde vivirían los humanos en Marte
Los hábitats imaginados por la ESA no se parecerán a búnkers o refugios, sino a entornos sofisticados, tecnológicos y confortables. "Imagine un futuro en el que los humanos vivan en enormes 'oasis espaciales' en Marte: hábitats interiores de lujo hechos de material que refleja el calor y que cultivan sus propios alimentos", describe el informe.
Estos oasis tendrán cúpulas blancas que protegerán a los habitantes de la radiación cósmica, el polvo y las temperaturas extremas. Funcionan como ecosistemas cerrados, con generación propia de energía y alimentos, evitando así la necesidad de constantes envíos de suministros desde la Tierra.
En su interior habrá invernaderos de alta tecnología, con condiciones controladas para cultivar papa, arroz, hongos, tomates y vegetales de hoja verde. Esta estrategia replica lo visto en la película The Martian (2015), protagonizada por Matt Damon, pero con mayor sofisticación.

"Los próximos pasos en la exploración humana implicarán estancias más largas y destinos más lejanos. La clave para el éxito de estos proyectos será la creación de una infraestructura más permanente con mayor independencia de la Tierra", señala la ESA.
También se espera que estos refugios incluyan sensores capaces de detectar riesgos como rocas espaciales entrantes o cambios en la atmósfera. Además, los materiales deberán ser "inteligentes", con capacidad de adaptarse para maximizar la protección.
Finalmente, el modelo contempla el reciclaje de desechos espaciales y la extracción de materiales de cometas y asteroides, tanto para construir como para analizar la historia del sistema solar. Bajo esta lógica, Marte no solo será un hogar eventual, sino también una base para expandir la presencia humana más allá del planeta rojo.
RV / Gi