La fractura tectónica en el sistema Rift de África Oriental tiene actualmente una longitud de 6.400 kilómetros y, oscila entre los 48 y 64 de ancho. Los investigadores plantean que las “grietas” continuarán apareciendo a medida que las placas Somalí y Nubia continuen separándose, lo que eventualmente provocará la división del país insular de Madagascar en dos atolones, el cual se encuentra ubicado en el Océano Índico.
El profesor de la Universidad de California en Santa Bárbara, Ken MacDonald, precisó que “el fenómeno se fue ensanchando a un tiempo de media pulgada (1,27 centímetros) por año”.
En esta misma línea, Macdonald señaló que "lo que podría suceder es que las aguas del Océano Índico lleguen e inunden lo que hoy es el Valle del Rift de África Oriental". A su vez, indicó que el nuevo océano podría “llegar a ser tan profundo como el Atlántico” si las aguas continúan fluyendo hacia la zona, según declaró al medio Daily Mail.

El suceso de mayor impacto para los analistas ocurrió en 2005, cuando una grieta de 60 kilómetros se abrió súbitamente en el oeste de Etiopía. En cuestión de minutos, el terreno se desplazó dos metros, un cambio que normalmente tardaría siglos.
Aunque se desconocen completamente los mecanismos que impulsan estos movimientos, algunos científicos sugieren que podrían estar relacionados con lentos flujos circulares de roca parcialmente fundida, impulsados por el calor que emana del núcleo terrestre.
Los sistemas de África Oriental se exploraron con termomecánicos en 3D, por lo que lograron recrear “una simulación por computadora para probar si estas deformaciones anómalas son impulsadas por un afloramiento flotante caliente conocido como Superplume Africano”, reveló un estudio publicado en la revista Journal of Geophysical Research en 2023
El proceso geológico descrito, transformará drásticamente la geografía de la región, dando paso a la formación de nuevas masas de agua y modificando el paisaje africano.

Ken Macdonald:“Lo que no sabemos es si esta ruptura continuará el ritmo actual para, eventualmente, separar el continente africano y abrir una ciencia oceánica”
Ante este escenario de incertidumbre que altera el territorio de los países africanos, Ken Macdonald, participe del equipo de investigación sobre sistema Rift de África Oriental, sostuvo: “Lo que no sabemos es si esta ruptura continuará el ritmo actual para, eventualmente, separar el continente africano y abrir una ciencia oceánica y después, quizá, algo mucho más grande, como una versión pequeña del océano Atlántico”.
PM