CULTURA
prohibicion en la patria de putin

Librerías rusas retiraron de la venta el comic ‘Maus’, de Art Spiegelman

Se trata de una de las primeras historietas en merecer una atención de la “alta cultura”, vendió medio millón de ejemplares y ganó el Pulitzer en 1992. Pero en Rusia la califican como “propaganda nazi”.

Art. Esto ocurre cuando Rusia se prepara para conmemorar el próximo 9 de mayo los setenta años de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nacionalsocialista. En la foto, Art Spiegelman.
| Cedoc

La novela gráfica Maus, escrita y dibujada por Art Spiegelman, la única en su género en ganar un premio Pulitzer (1992), y uno de los testimonios más sutiles sobre el Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial, ha sido retirada de las librerías más importantes de Moscú (tanto de las estanterías como de las páginas web) por exhibir en su portada una esvástica nazi. De hecho, la obra, que relata las vivencias del padre del autor, un judío polaco que sobrevivió al Holocausto, en el transcurso de la semana fue excluida de algunas grandes librerías de Moscú (Biblio Globus, Moskva, Moskovski Dom Knigui y Respublika) en conformidad con una ley aprobada por el gobierno en diciembre, la cual prohíbe la propaganda nazi. Según The Moscow Times, la eliminación de Maus de estas librerías responde a la causa penal que se abrió a principios de este mes contra una juguetería moscovita por la venta de bustos de soldados y oficiales nazis, incluso de las Waffen SS.

La directora de la editorial Corpus, que edita Maus en Rusia, Varvara Gornostayeva, confirmó el retiro de la obra a The Guardian. En declaraciones a este diario, Spiegelman definió la prohibición como “la señal de algo peligroso”. El autor relató también que la publicación de Maus en Alemania, hace unos años, tuvo que lidiar contra una ley que prohibía símbolos nazis, como la esvástica, en libros que no fueran de carácter histórico, hasta que finalmente logró convencer al Ministerio de Cultura de que la obra era un trabajo documental sobre el Holocausto y no propaganda nazi. Desde entonces, Spiegelman exigió que la portada se conservara en todas las ediciones de Maus. Para el diario británico, la prohibición –un poco menos de dos años después de su publicación rusa y a varios meses de vigencia de la ley– se explica por la proximidad de los actos del 9 de mayo, en conmemoración del 70º aniversario del Día de la Victoria, en el que Rusia recordará cómo sus tropas vencieron a las de Hitler. Al parecer, por este motivo las autoridades incrementaron los controles.

Sin embargo, de acuerdo con la radio Eco de Moscú, la decisión de las grandes librerías de retirar la obra de Spiegelman es consecuencia de una autocensura por miedo a posibles medidas gubernamentales. La cadena de librerías Respublika dijo al New York Times que habían preferido retirar de su catálogo la novela gráfica de Spiegelman porque no estaban seguros de su legalidad. Si Rusia se está preparando para conmemorar el próximo 9 de mayo los setenta años de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nacionalsocialista, razón por la cual hace cuatro meses se aprobó una ley para proscribir cualquier símbolo nazi, es probable que los libreros retiren Maus del mercado debido a la esvástica de la portada. En cualquier caso, ya sea censura de las autoridades o autocensura de las librerías, tanto unos como otros parecen desconocer el contenido y el valor artístico de la obra.

Traducida a más de treinta idiomas, Maus es una novela gráfica serializada desde 1980 hasta 1991 en la revista Raw, una publicación de cómics de vanguardia, hasta reunirse en un único volumen. La edición actualmente disponible en castellano es la del sello Reservoir Books de Random House Mondadori.