'El arte callejero NO es delito' reza la frase con la que se encontraba meses atrás cualquier persona que se topará en un subte o en alguna esquina porteña con algún músico que tocaba 'a la gorra'. Y es que, a partir de la modificación de un artículo del código contravencional de la ciudad de Buenos Aires, hacer eso (o cualquier intervención artística en la vía pública) podría haber estar considerado como un 'ruido molesto', y por lo tal, se le podía aplicar alguna multa o bien una pena de hasta cinco días de prisión.
Sin embargo, y tras una serie de marchas, y reuniones entre funcionarios y representantes de artistas que trabajan en las calles, se llegó a un acuerdo que reafirma el lema del párrafo inicial (por lo menos en Capital Federal): el arte callejero, efectivamente, no está considerado un delito.
Polémica. A mediados de 2018 una situación particular tenía en alerta a los artistas callejeros de la ciudad de Buenos Aires, dado que el Ejecutivo había enviado una reforma al Código Contravencional –el cual regula entre otras cosas a la actividad artística en la vía pública- y esto ponía en peligro su fuente de trabajo por considerarlo como 'ruido molesto'. De haber avanzado esa modificación a la Ley (la 1.664-J-18) podían hasta ser denunciados en forma anónima y removidos por la Policía porteña. Sin embargo, eso no sucedió.
"En el Código actual se dispone que la Policía solo puede usar la fuerza pública en casos de una contravención flagrante, solo luego de una advertencia y si la persona persiste en la conducta. La modificación elimina la posibilidad de advertencia, y a autoriza a llevarse detenida a una persona que esté haciendo algún ruido molesto, sin advertencia y sin posibilidad de bajar el volumen o hacer cesar la actividad. También, que el juez podría imponer sanciones de 1 a 5 días de prisión para los infractores. Y que el Estado podrá perseguir a quien entienda que realiza los ruidos, aun cuando no exista denunciante o el mismo retire la denuncia", detallaron los artistas mediante un comunicado.
En ese momento, el presidente de la Comisión de Justicia de la Legislatura de la Ciudad, Daniel Presti, explicó: "Se trató de una interpretación errónea de los artistas. La ley no apunta a perjudicarlos. Vamos a convocarlos y a manifestarles nuestro interés para que sigan trabajando y nada los afecte. El malentendido se va a solucionar". También, añadió: “No se trata de un proyecto que limita a los ruidos molestos. Fue pensado para las contravenciones no provistas, como ruidos de gritos de madrugada, u hostigamiento de trapitos o limpiavidrios. Lo de intervenir a pesar de que no exista una denuncia formal tenía que ver con, por ejemplo, situaciones como la de una mujer que no se anima a denunciar a un trapito o limpiavidrios".
Situación actual. El presidente del Frente de Artistas Ambulantes Organizados FAAO, Alejandro Cabrera Britos, explicó en diálogo con PERFIL cómo se resolvió la situación: “En junio el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta presentó un proyecto donde solicitó la reforma del Código contravencional y eso lo derivó a la comisión de Justicia de la Legislatura porteña que, junto con la de Asuntos Constitucionales, comenzaron con el tratamiento del proyecto. Nosotros mantuvimos una serie de reuniones con ellos y expusimos nuestra preocupación porque en el primer borrador presentado directamente se penalizaba la actividad callejera con hasta cinco días de arresto; probations y con exacerbadas multas en valor de dólares. Ahí hicimos una serie de manifestaciones pacíficas y artísticas, una de ellas reunió a 24.000 personas, quienes nos juntamos para realizar un abrazo a la Legislatura en pleno tratamiento del proyecto".
"Los artistas callejeros somos una parte del paisaje de la ciudad de Buenos Aires", sostiene Cabrera Britos
En ese marco, precisó: "En el canal de diálogo con las autoridades de la ciudad de Buenos Aires logramos revertir un punto fundamental del proyecto en donde se hace referencia a los ruidos molestos, y ahí nos exceptúa". El titular del Frente hace alusión al artículo 87 del texto, donde (con la modificación) se estableció: 'Quien perturba el descanso o la tranquilidad pública mediante ruidos que por su volumen, reiteración o persistencia excedan la normal tolerancia, es sancionado/a con uno a a cinco 5 días de trabajo de utilidad pública o multa cincuenta 50 a cien 100 unidades fijas. Cuando el origen de los ruidos provengan de la vía pública con excepción de las manifestaciones artístico- culturales a la gorra y todas las actividades culturales que cuenten con permiso de los organismos competentes de la Administración Pública, la sanción es de dos 2 a diez 10 días de trabajo de utilidad pública, multa de cincuenta 50 a doscientas 200 unidades fijas o arresto de uno 1 a cinco 5 días'.
Al ser una ley que sólo rige en Capital Federal, en otros puntos del país se producen complicaciones con esto: "En Mendoza y en Córdoba hay denuncias permanentes de colegas que han sufrido detenciones con la excusa de averiguación de antecedentes y ahí hay que seguir trabajando también pero es ya otra estructura. Lo importante es que como Capital Federal es un observatorio, un lugar donde lo miran muchos, es una señal política muy afortunada para nosotros que aquí sea legal porque se puede replicar en otros lugares", cuenta Cabrera Britos quien remarca además un detalle no menor y es que "en todas las líneas de subte, contando vagones y andenes, hay en la actualidad 260 músicos". Y, en total hay más de 3.300 artistas ambulantes en la Ciudad.
Asimismo, el titular de FAOO destacó la actuación de dos funcionarios dentro de este conflicto: "Las dos personas con las que tenemos diálogo más fluido y quienes han cumplido todo lo que dijeron y que nos han defendido sin conocernos, son el ministro de Cultura porteño Enrique Avogadro y el responsable de la Dirección General de Música, Juan Manuel Beati".
"El espectro de artistas callejeros incluye músicos; muralistas; marionetistas; clowns; malabaristas; titiriteros; estatuas vivientes; actores y bailarines"
Apoyo. El Instituto Nacional de la Música (INAMU) fue uno de los organismos que ayudó a lograrlo. "Hicimos un video que lo emitió la TV Pública llamado Músicos en los espacios públicos, en donde mostramos diferentes artistas que comenzaron sus carreras tocando en la calle. Ahí aparecen Nahuel Pennisi; Facundo Arana; Lalo Mir; Piñón Fijo; Alejandro Lerner; Mex Urtizberea y Miss Bolivia, entre otros y con eso buscamos dar nuestro apoyo porque muchos de ellos empezaron sus carreras tocando en el subte o en la calle", contó el presidente de la entidad, Diego Boris.
Arte callejero... y viral. Semanas atrás comenzó a circular en redes sociales un emotivo video donde un violinista llamado Iván Begur y su mujer Diana Gómez, quien es cantante soprano, fueron filmados en la estación de trenes de Lanús mientras interpretaban un tema.
En las imágenes en cuestión, la pareja que está acompañada por su pequeña hija, canta y toca el tema Con te partiro. Allí se observa además como los pasajeros que esperan el tren Roca quedan sorprendidos con el espectáculo callejero a la gorra.
Otro caso es el de Sabrina Sosa, una joven cantante lírica oriunda de Adrogué, que muestra su talento en la línea H del subte porteño.
