Con una profunda tristeza, pero también conformes por lo hecho, el equipo argentino de Copa Davis volvió al país, luego de haber caído frente a Rusia 3-2 en Moscú. Alberto "Luli" Mancini, capitán del equipo, manifestó su pesar por no haber traído la "Ensaladera de Plata" por primera vez en la historia, aunque se los notó convencido de haber dejado todo en pos del objetivo.
En primer término, arribaron el capitán Mancini y la mayor parte de los jugadores: Agustín Calleri, José Acasuso, Juan Ignacio Chela y Guillermo Cañas. Un rato más tarde, en otro vuelo, llegó David Nalbandian.
Mancini dijo tener una gran "sensación de tristeza", pero remarcó que los jugadores "tienen que estar tranquilos", porque " estuvieron a un paso de ganarlo" ante un potente equipo ruso y en su propia casa.
El capitán argentino reconoció que hay cosas para mejorar, pero confirmó sus ganas de continuar al frente del equipo en 2007 y buscar una nueva oportunidad para quedarse con la Copa Davis.
Mancini explicó las razones de la derrota 3-2 ante Rusia en la final de la Copa Davis y dijo que “no hay nada que reprocharse”, aunque opinó que la clave de la frustración estuvo en una floja producción en el partido de dobles disputado por David Nalbandian y Agustín Calleri.
“Estos chicos hicieron algo increíble para el tenis argentino. No hay nada que reprocharse. Se estuvo cerca, pero no se dio”, afirmó Mancini en una entrevista publicada hoy por el diario La Nación.
El capitán argentino buscó explicaciones para la sufrida derrota en Moscú: la condición de visitantes, la superficie y “un equipo más fuerte que el nuestro”. Sin embargo, remarcó que el equipo peleó hasta el final y estuvieron muy cerca de la hazaña.
“Pudimos concretar una actuación que quedará en los libros. Yo lo tomo como un triunfo. Pasaron 25 años para que la Argentina volviera a llegar a una final de la Copa Davis”, afirmó Mancini.
Para el “Luli”, todo salió de acuerdo a lo planificado, aunque se mostró sorprendido por la “la alta producción rusa” y, al igual que la mayoría en el mundo del tenis, opinó que la clave que inclinó la serie a favor de los locales fue la "floja" actuación del dobles argentino.
Mancini es optimista de cara al futuro: “Cuando hablemos y veamos lo positivo de este trabajo no tengo dudas de que los jugadores van a tomar impulso y fuerzas para arrancar otra vez. Ellos siguen con muchos deseos de ganar la Davis”.
Consultado por la pelea con Nalbandian en los días previos a la final, el capitán argentino minimizó lo sucedido y dijo que no fue un factor decisivo en la frustración ante los rusos. “No perdimos por eso”, afirmó el “Luli”, aunque reconoció que el entredicho no provocó un "buen efecto".