River puede darse lujos que el resto de los equipos no admitirían. Por ejemplo, poner jugadores que habitualmente son suplentes para visitar a Atlético Tucumán. Los seis puntos de diferencia que le llevaba al escolta San Lorenzo en la Liga Profesional y la semana intensa que se le viene con un viaje a Brasil y el Superclásico de la próxima fecha impulsaron a Martín Demichelis a guardar a los titulares. Asumió un riesgo que se reflejó en el resultado: empató 1-1 gracias a un gol en contra sobre la hora, que llegó después de sufrir ochenta minutos. Ahora debe esperar si San Lorenzo hoy suma en Liniers y se le acerca.
Perder por un gol y quedarse con un jugador menos cuando apenas se jugaron veinte minutos del partido puede ser traumático. Para River lo fue. Desde que Mateo Coronel sentenció a Franco Armani y le rompió además un invicto de 744 minutos sin recibir goles, el Millonario sintió el golpe. Para peor, cinco minutos después José Paradela se fue expulsado por doble amarilla.
Atlético Tucumán hizo su negocio. Peleó el mediocampo y le robó la pelota al equipo de Demichelis. No lo dejó jugar. Y trató la pelota con criterio. Así llegó el gol. Una habilitación de Marchiori a Corones, que dejó en el camino a Jonathan Maidana y definió por debajo del cuerpo de Armani.
Para el segundo tiempo River salió más ambicioso. Empezó a mostrar chispazos del equipo que llegó a la cima del torneo con solidez defensiva, juego colectivo y efectividad en los últimos metros. Un tiro libre de Agustín Palavecino que sacó el arquero Marchiori con cierta dificultad generó entusiasmo en el Millonario.
Pero Atlético Tucumán tenía bien aprendido el libreto. Se replegó unos metros, dejó venir a un River desesperado y apostó por llegar con contragolpes.
Los ingresos de Lucas Beltrán y Esequiel Barco pretendieron darle al equipo el volumen de juego que hasta el momento no encontraba. Pero la propuesta de Demichelis no prosperó. Les faltó contundencia, pero tuvo una cuota de suerte: el gol en contra de Pereyra cuando faltaban cuatro minutos para el final le dieron a River el punto que no mereció.
Atlético Tucumán lo tenía controlado, pero se tuvo que resignar al empate. El equipo de Lucas Pusineri, después de un pobre comienzo de torneo, se sacó de encima a dos grandes con mucha dignidad: la fecha pasada le ganó a Racing y anoche empató con el puntero River.
Ahora al Millonario se le viene una semana intensa: el viaje a Río de Janeiro para jugar ante Fluminense por la Libertadores y el primer Superclásico contra Boca de la era Demichelis.
Entradas para el Súper
River anunció que los socios y las socias del club podrán reservar a partir de hoy sus entradas para el Superclásico del próximo domingo 7 de mayo, por la fecha 15 de la Liga Profesional. El club informó que se habilitará la venta a partir de las 12 y tendrán prioridad quienes no forman parte de los abonados a “Tu Lugar en el Monumental”.
Luego, a partir de las 17, el remanente de lugares se ampliará para los integrantes de la Comunidad Somos River hasta agotar la disponibilidad de los 83.197 lugares que tiene habilitados el estadio, luego de las últimas reformas que se inauguraron este año.
El sistema de canje y compra de plateas y cabeceras tendrá los requisitos habituales, especialmente con la cuota al día. Una vez confirmada la compra, la ubicación se cargará automáticamente al carnet único, con el cual se ingresará al estadio sin la necesidad de realizar trámites adicionales.
La dirigencia millonaria estima que no habrá remanente por fuera de la masa societaria y que, tal como viene sucediendo desde febrero de 2022, el Más Monumental tendrá localidades agotadas, está vez en pocas horas.
Será el primer superclásico de River con Martín Demichelis en el banco luego de haber asumido la conducción del equipo en reemplazo de Marcelo Gallardo.