Mientras muchos ya eligen marcas de pan dulce y ajustan detalles para las vacaciones, Independiente y Racing encaran la serie más intensa del año. La final de la liguilla Pre Libertadores los juntó. Y sin grises: el que pierde afuera. Dos partidos a pura tensión, más adrenalínicos que la serie 24. Hoy es el primer capítulo, en cancha del Rojo. Ahí estarán, entonces, los dos grandes de Avellaneda. Sin Mancuello y sin Milito, pero con todas las intenciones de entrar a la Copa.
De ganar la serie, para Independiente sería un reencuentro con aquel viejo amor, la Libertadores, que conquistó siete veces. Por eso, el desafío copero está en la genética roja. Para esta tarde, el entrenador Mauricio Pellegrino pondrá a Diego Martín Rodríguez por Jesús Méndez, que fue expulsado en el partido anterior, ante Belgrano, por sumar su segunda amarilla al sacarse la camiseta dentro del campo de juego. Habrá, además,
otra modificación: Matías Pisano entrará desde el inicio por el capitán Federico Mancuello, descartado por una lesión.
Racing corre con la ventaja de cerrar la serie en su cancha porque terminó mejor ubicado que Independiente en la tabla del torneo. De todos modos, el partido de hoy lleva adjunto un desafío extra: cortar la racha de catorce años sin poder ganar en el estadio Libertadores de América. Estos dos encuentros representan además la despedida de Diego Cocca, el entrenador que hace un año logró sacar campeón a La Academia.
Para esta tarde, Cocca decidió meter tres cambios: Leandro Grimi irá al lateral izquierdo por Germán Voboril, Gastón Díaz saldrá en el medio por el uruguayo Washington Camacho y el paraguayo Oscar Romero ingresará por Diego Milito, expulsado la fecha anterior frente a Estudiantes de La Plata. Bajo este esquema, Gustavo Bou será el único delantero de punta definido.
El fantasma del Kun
El destino quiso que un día antes del clásico jugaran las reservas. Fue ayer a la mañana, en el predio de Villa Dominico. Y como si fuera necesario sumarle tensión a la previa, Independiente le ganó 2-1 a Racing. Lo más notable es que uno de los dos goles lo convirtió Gastón del Castillo, uno de los hermanos menores de Sergio Agüero. El pasado volvió para salpicar el clásico de Avellaneda. Aquellos goles que el Kun le convirtió a La Academia esta vez se materializaron en el hermano.
El otro gol de Independiente lo convirtió Ezequiel Vidal, y para Racing descontó Lautaro Martínez de tiro libre. Con este resultado, Independiente quedó como líder del torneo, con 58 puntos, uno por encima de San Lorenzo, que tiene un partido menos.