Las lágrimas de las jugadoras de la selección argentina de fútbol femenino, tras el empate 1-1 ante Panamá en el partido de vuelta de un repechaje en el que fueron justas ganadoras por un global de 5-1, eran de felicidad y satisfacción por el objetivo cumplido: Argentina volverá a jugar un Mundial después de 12 años.
Solo ellas saben todo lo que sufrieron y lucharon para lograr este momento de gloria que tanto estaba necesitando esta disciplina deportiva, tan castigada y olvidada en los últimos años. Por eso, el interminable festejo de Ruth Bravo, la subcapitana del equipo dirigido por Carlos Borrello, tras la pitada final y la clasificación a Francia 2019.
“No nos entraba la sonrisa en la cara al ver cuando la árbitra pitó el final del partido. Automáticamente, todas salimos corriendo a abrazarnos, y algunas, como yo, nos largamos a llorar de felicidad, porque veníamos peleando desde hace mucho tiempo por esto. Jugar un Mundial es el sueño máximo de un deportista, es algo que no se puede explicar con palabras”, dice la jugadora del Club Deportivo Tacón, de la Segunda de España.
Su paso por los seleccionados Sub 17 y Sub 20 –con el que clasificó para el Mundial de Japón 2012– la convierten en palabra autorizada para hablar del pasado, presente y futuro del fútbol femenino argentino: “Estamos creciendo, despacito, pero a pasos firmes y seguros. Fueron muchos años de desidia y abandono por parte de los dirigentes, pero ahora se están haciendo las cosas mucho mejor que antes, y haber clasificado para una Copa del Mundo después de 12 años es el primer gran paso hacia el resurgimiento del fútbol femenino argentino”.
Su rostro se ilumina cuando se proyecta al Mundial que se disputará entre el 7 de junio y el 7 de julio. “Puede pasar cualquier cosa, y nosotras vamos a dejar todo para ganarlo. Ese es mi gran sueño y el de todas mis compañeras, que son unas fieras y no saben de sacrificios ni imposibles. Vamos a dejar hasta la última gota de sangre y sudor por esta camiseta. Este equipo tiene mucha hambre y le sobra talento. Ahora queremos ganar el Mundial y nada ni nadie nos puede impedir que soñemos con eso. De solo imaginarlo siento un cosquilleo por todo el cuerpo”, cierra la brava subcapitana de esta selección que acaba de hacer historia.
La otra copa libertadores. UAI Urquiza, campeón argentino del fútbol femenino, debuta hoy a las 19 ante Cerro Porteño, de Paraguay, en la Copa Libertadores de América, que se desarrolla en la ciudad de Manaos, Brasil. El Furgón enfrentará a Cerro Porteño en el estadio Arena da Amazonia, que fue sede del Mundial de varones 2014. UAI Urquiza disputará la Libertadores por tercera vez en su historia y es cabeza de serie del Grupo C, también integrado por Flor de Patria (Venezuela) e Iranduba (Brasil).
