El árbitro de confianza de la casa ya no dirige. Pablo Lunati gozaba de los beneficios de dirigir los partidos más importantes del fútbol argentino, hasta que la AFIP le sacó tarjeta roja. El ente recaudador investigó al juez y le marcó la cancha; entendían los funcionarios que el nivel de vida de Lunati no se correspondía con su actividad. Hace dos semanas, el árbitro recibió un revés judicial, ya que el juzgado federal de Primera Instancia en lo Civil, Comercial y Contencioso Administrativo Número 2 de San Martín desestimó el pedido de la defensa. El último encuentro que dirigió Lunati, de 46 años, fue en marzo pasado, en el partido de la sexta fecha del Torneo Final que Arsenal le ganó 3 a 2 a San Martín de San Juan.
En el marco de la investigación, la AFIP le allanó siete propiedades, todas en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires.
Por ahora, el hombre que había asegurado que volvía a dirigir en este campeonato tendrá que seguir esperando. La AFIP no está dispuesta a quitarle la roja.