El ciudadano italiano que atravesó este lunes el terreno del estadio de Lusail con una bandera arcoíris y una camiseta de apoyo a las mujeres iraníes y a Ucrania, fue rápidamente liberado "sin consecuencias", según el informe transmitido este martes por el Ministerio italiano de Asuntos Exteriores. La irrupción del activista se produjo en el contexto del partido entre Portugal y Uruguay, rivales del Grupo H del Mundial de Qatar,
"Tras una breve detención", el hombre identificado como Mario Ferri, nacido en 1987, "ya fue liberado por las autoridades sin consecuencias", sostuvo la Cancillería en un comunicado.
Por otra parte, se supo que "El halcón" suele realizar tipo de maniobras en los certámenes futboleros. En el Mundial del 2014, que tuvo lugar en Brasil, entró en el terreno durante el duelo Bélgica-Estados Unidos con una camiseta que llevaba las inscripciones "Salven a los niños de las favelas" y "Ciro Vive", en homenaje a un aficionado del Nápoles fallecido poco tiempo antes, de acuerdo con la agencia italiana AGI.
Desde el comienzo de la competición organizada en Qatar fue la primera vez que el juego fue interrumpido por una intrusión de estas características. El hecho adquirió máxima visibilidad debido a las críticas occidentales respecto al tratamiento de las personas LGBT+ en el país musulmán, donde la homosexualidad es perseguida penalmente.
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Cómo fue la secuencia
En el minuto 52 del partido, tras haber irrumpido súbitamente en el terreno por espacio de medio minuto aproximadamente, el hombre fue derribado por un oficial del estadio y escoltado por el personal de seguridad fuera de la cancha.
"La FIFA prohibió los brazaletes de capitán arcoíris y las banderas de los derechos humanos en las tribunas, bloquearon a todo el mundo, PERO NO A MÍ, como Robin Hood", publicó Mario Ferri en su cuenta de Instagram, quien se enorgulleció porque, según sus palabras, "infringir las reglas por una buena causa nunca es un crimen".
El ciudadano que generó la polémica llevaba una camiseta con el logo de Superman por delante con una inscripción de apoyo a Ucrania, "Save Ucrania" ("Salven a Ucrania"), y en la espalda un mensaje en favor de las mujeres iraníes. Su arcoíris llevaba inscrita la palabra 'paz'.
La escena solo fue exhibida furtivamente por la televisión.
"Sabemos lo que pasa fuera del Mundial. Seguro que estamos con ellos, con Irán también, con las mujeres iraníes. Espero que no le pase nada a este joven, ya que comprendimos su mensaje y pienso que el mundo lo comprendió también", había comentado el jugador portugués Ruben Neves una vez finalizado el encuentro.
Si bien la FIFA había asegurado que las banderas o la ropa con los colores del arcoíris serían aceptadas en los estadios, en realidad, han sido confiscadas en varias ocasiones por las fuerzas de seguridad.
CA / ds