Juan Román Riquelme negó hoy enfáticamente que haya operado para evitar la llegada de Guillermo Barros Schelotto o Diego Cagna como futuros entrenadores de Boca Juniors. El volante xeneize salió al cruce de informaciones periodísticas que indicaban que no le había dado el visto bueno al presidente Pedro Pompilio, para la llegada de los ex jugadores al banco xeneize.
Riquelme consideró como una "falta de respeto" las informaciones publicadas hoy y que mencionaban que el volante le había bajado el pulgar a Guillermo y Cagna como posibles futuros técnicos de Boca.
"Me parece una falta de respeto. Uno va a alentar al equipo, entrena con el plantel y como perdimos un partido, estando arriba de un avión, esa persona miente descaradamente", arremetió Riquelme al apuntar contra un periodista de televisión.
Quien en realidad vetó tácitamente a Guillermo y a Cagna fue el propio Pompilio, quien dijo que "no es el momento oportuno" para que recientes ex futbolistas afronten al menos en Boca la función de director técnico.
"Hay un cambio generacional en el equipo. Me parece que los ex jugadores siguen siendo compañeros de los que están y particularmente me parece que es un motivo de conflicto en la parte humana", le dijo Pompilio a la radio La Red antes de partir desde Japón de regreso a Buenos Aires.
Riquelme se mostró indignado. Al hablar en la escala en Santiago de Chile con la misma emisora, criticó la información y aseguró que "jamás" habló con Pompilio salvo sobre el partido ante el Milan.
" Me molesta mucho que alguien insinúe cosas que no son verdad", sostuvo Román, quien dijo haber llegado para ser "uno más del plantel" y que la decisión sobre el técnico "la deberán tomar en estos días los dirigentes".
Riquelme dijo que su misión en Boca será "hacer la pretemporada lo mejor posible y jugar lo mejor posible el tiempo del contrato".
Fuente: DyN