La entidad
xeneize
terminó de definircon los españoles el tema impositivo, que trababa el pase
y Riquelme llegará mañana. Harán un
último intento ante la FIFA para ver si puede ir al Mundial de Clubes.
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CeDOC
El pase de Juan Román Riquelme a Boca Juniors quedó definitivamente resuelto esta noche, pero recién mañana se formalizará la operación y el talentoso armador emprenderá el viaje de regreso desde España. "Está todo arreglado, mañana se firman los papeles y luego llamamos a Riquelme para que se venga. Estaría llegando el jueves", precisó el vicepresidente de Boca, Pedro Pompilio, en declaraciones para DyN.
El candidato a presidente por el oficialismo en el club porteño representó a la institución en la reunión con los enviados del Villarreal que se desarrolló en el Park Hyatt Hotel de Recoleta y duró aproximadamente siete horas. Los intereses de la entidad española en el decisivo cónclave fueron defendidos por José Manuel Llaneza, consejero, y Miguel Angel Pérez Ferrer, integrante del consejo directivo.
Riquelme se comprometió a jugar para el club xeneize hasta junio de 2010 a cambio de los nueve millones de euros que protegió con tanta tenacidad. El Villarreal asumirá un papel de financiera en esta negociación y será compensado con porcentuales de futuras transferencias de futbolistas de Boca.
Por lo tanto, el único tema que queda pendiente es el de la inclusión de Riquelme en la lista de buena fe para intervenir en el Campeonato Mundial de Clubes que se realizará próximamente en Japón, pero en ese caso el esfuerzo probablemente concluya con un resultado negativo, porque el primer intento se concretó cuando los plazos estaban vencidos.
Boca una vez que se firme la documentación insistirá ante la FIFA para tratar de lograr una excepción favorable a Riquelme y esperará la respuesta hasta el viernes próximo, pero lo más factible es que el entrenador Miguel Angel Russo tenga que arreglarse en Japón sin la máxima estrella que vuelve a tener el plantel auriazul.
