El Zoco Wakif es el corazón de Doha. El antiguo mercado donde los beduinos llegaban del desierto a vender sus animales fue abandonado durante años, pero los qataríes han sabido recuperarlo y ahora se ha convertido en una hermosa mezcla de restaurantes y callejones con puestos de venta de especias y camisetas de fútbol.
Marruecos 0-0 Croacia
Nos cuesta encontrar una pantalla en el Zoco, pero los gritos nos animan a entrar a un bar repleto de marroquíes viendo el debut contra la subcampeona del mundo. Ni Achraf Hakimi con un tiro libre desde casi 40 metros, ni Luka Modric con un remate desde la frontal pudieron modificar el marcador en un partido muy igualado. Marruecos 0, Croacia 0. Los marroquíes lo celebran como una victoria.
Japón 2-1 Alemania
Camino al estadio de Al Thumama, al sur de Doha, donde debuta España esta noche, escuchamos que Alemania está haciendo sus deberes y le gana a Japón con un gol de penal de Ilkay Gundogan. Cuando encontramos una tele, lo vemos volar al arquero japonés de palo a palo. Pero los japoneses, con su juego vibrante, llegan todos al área, Neuer despeja un tiro de Minamino pero Ritsu Doan arremete para empatar el partido. Sobre el final, la lentitud de Süle habilita a Takuma Asano que aguanta y define con un tremendo derechazo. Japón 2, Alemania 1. Mal de muchos, consuelo de tontos.
Los medios alemanes destrozaron a su selección luego de la derrota ante Japón en el Mundial de Qatar
España 7-0 Costa Rica
El estadio de Al Thumama es divino. Visto a la distancia, simula una gahfiya, el gorro que utilizan los qataríes. Visto de cerca, parece un precioso juego de hilos plateados trenzados. Luis Enrique siempre nos da sorpresas, no juega Morata, va Marcos Asensio como falso nueve, y juega Rodri de central, previendo que tendremos mucho balón. La Costa Rica de Keylor Navas sueña con volver a dar los batacazos de Brasil 2014 en este Mundial tan dado a los sorpresas.
El comienzo del partido nos deja un detalle del profesor Busquets, señorial. Acto seguido, Pedri frota la lámpara y lo deja solo a Dani Olmo que no puede definir. La pelota pasa por Busquets, por Pedri, y termina en Asensio que mete un zurdazo abajo que se va apenas afuera. Tiki, taka, tiki, taka, juegan todos, Costa Rica ni la huele. Dani Olmo, Gavi, Dani Olmo la controla solo en el área y se la pica a Keylor Navas. Golazo. Es 1 a 0. Una exhibición.
El juego no para, siguen los toques, hacia adelante, siempre conducidos por Sergio Busquets, el único campeón del mundo que sigue en el equipo. La abre para Jordi Alba, que vuela por su banda como de costumbre, y centra para la llegada de Marco Asensio. El falso nueve, con esa zurda prodigiosa, le da fuerte a la izquierda de Keylor Navas que no podrá llegar. Ya es el 2 a 0. Un recital.
Caño de Jordi Alba, taco de Marco Asensio. Vuelve a entrar Jordi Alba al área y los costarricenses andan tan mareados que Duarte se lo lleva por delante y comete penal. La fiesta es completa cuando Ferrán Torres hace una pausa antes de tirarlo con clase a la derecha de Keylor. 3 a 0 en 30 minutos, ¿pararán acá?
Se termina el primer tiempo con otro detalle de Busquets para Pedri, conducción de Pedri para Asensio, y su zurdazo que se va alto. El árbitro emiratí, que está disfrutando tanto como nosotros, agrega cinco minutos y se lleva la pelota al vestuario. Hoy sí que está contenta Al Rihla, la pelota del Mundial. La han tratado como nunca o, mejor dicho, como habían tratado a la Jabulani en Sudáfrica.
El segundo tiempo empieza igual, acelera Azpilicueta, y Asensio la tira otra vez por arriba. Pedri se pasea por el campo haciendo calesitas, es un placer verlo conducir el balón, encima, cuando los ticos deciden cruzar el mediocampo, retrocede y recupera. Madre mía. Ahora es Gavi el que encara, se la da a Ferrán Torres para que se meta en el área, el ex del Valencia choca contra una defensa tan desordenada que hasta Keylor se marea, de media vuelta marca el 4 a 0 que cae como por decantación.
Luis Enrique lo pone a Morata por Ferrán, que ya marcó un doblete. Carlos Soler lo reemplaza a Pedri, descanso para el pibe. Los tacos ahora son en el área de Costa Rica. La primera que tiene Morata la tira a cualquier lado. Sale Jordi Alba ovacionado y debuta Álex Balde en la selección de España. Vaya debut, en la primera que agarra deja un surco en la banda izquierda. La segunda es un escándalo, el surco llega hasta el área chica, Keylor lo achica a Morata, el nueve del Atleti levanta la cabeza y lo ve entrar a Gavi. 18 años tiene Pablo Gavira, el jugador más joven en jugar un Mundial con la camiseta de España. Le pega seco abajo y pone el 5 a 0.
El partido sigue igual, España gana atrás, en el medio, y adelante. La pelota viaja de español en español, tiki taka tiki taka. La pelota se divierte hasta en los minutos de la basura. Nico Williams desborda y mete un centro hermoso, Keylor sale a despejar y se la deja en el punto penal a Carlitos Soler, que define a un palo para poner el 6 a 0. ¡La hora, juez! La piden hasta los españoles, si es que ya da pena ver a los ticos correr tras el balón.
Pero el árbitro emiratí y Al Rihla están disfrutando, así que decide jugar ocho minutos más. Y es que da gusto ver a España tocar el balón, circular, dejarla pasar entre las piernas para el compañero que viene detrás. Tocan y tocan, Nico para Morata, Morata para Dani, Dani de nuevo para Morata, y ahora sí, zurdazo de Morata abajo y llega su gol, el séptimo de España. 7 a 0. Sensacional.
Bélgica 1-0 Canadá
La jornada la cierran la Bélgica de Roberto Martínez contra la sorprendente Canadá, ganadora de la clasificatoria de la Concacaf, que vuelve a jugar un partido mundialista 36 años después de su única presentación. Los canadienses le juegan de igual a igual a los belgas, pero a Thibaut Courtois no le marca ni Alphonso Davies de penal, y Michy Batshuayi con su gol en el primer tiempo decide el partido. Bélgica 1, Canadá 0.
Nosotros seguimos con la cabeza en la magnífica presentación de la roja de Luis Enrique. La mayor goleada en la historia de España en un Mundial. Una verdadera exhibición futbolística, lo que uno viene a ver al Mundial, gracias España, gracias por jugar así.
Andrés Margolles, desde Doha, Qatar
