París - La Copa del Mundo-2007 de rugby, que terminó hoy con la victoria de Sudáfrica en la final contra Inglaterra (15-9) tuvo ritmo y color fuera de los estadios, pero mostró un estilo conservador en el terreno, dominado por las defensas y la utilización abusiva del juego de pie.
Choques de packs, rucks interminables, patadas de cañón y algún quiebre fueron la nota constante de la sexta edición del Mundial, que recompensó a los equipos tácticos que se ajustaron a esta fórmula. La radiografía de las semifinales dan un buen panorama de lo sucedido en Francia-2007. Lo mismo ocurrió en la final donde no hubo tries.
Sudáfrica se impuso categóricamente en semifinales a los Pumas argentinos (37-13), pero sus cuatro tries llegaron por dos intercepciones y otros errores de su adverdario. Inglaterra, que necesitó apenas cuatro penales para eliminar a Australia en cuartos de final (12-10), anotó un try 'sin pases' contra Francia, batida 14-9 con la patada de Andy Gomarsall y recuperación de Josh Lewsey, ante el error del fullback francés Damien Traille.
Tildado de estratega del juego de movimiento, el entrenador inglés Brian Ashton debió conformarse con volver al pragmatismo, apostando al juego de pie, una defensa impenetrable y ocupación de territorio, en semifinales. "Hubo momentos en que jugamos demasiado al rugby, principalmente durante diez minutos del segundo tiempo. Gritamos a los jugadores que pateen ese balón maltrecho para dárselo a Francia y ver qué hacían ellos, porque parecía evidente que no iban a hacer mucho más que nosotros", confesó Ashton.
La estrategia elegida por los ingleses desnudó las limitaciones de Francia, también centrado en la ocupación del campo adversario, con las patadas largas del tridente Lionel Beauxis, Cédric Heymans y Damien Traille, desplazado de centro a fullback en cuartos contra los All Blacks (20-18). Esta táctica, que desestabilizó a Nueva Zelanda en Cardiff, fue ineficaz ante el XV de la Rosa, parado para contener el juego rival sin demasiada magia.
Este Mundial tal vez marcará el último paso en la evolución del juego a partir de las actuales reglas, cuya última modificación data de 1996, con la legalización del 'ascensor en el line'. "Habrá una conferencia sobre el juego en noviembre y deberemos reflexionar sobre la forma de encarar el juego para hacerlo más atractivo", reveló Jo Maso, mánager del XV de Francia. En esta conferencia, la legislatura deberá concentrarse en temas como la zona de scrum abierto (ruck), donde algunos gestos (manos sobre el balón y robos por raspado) al límite de la legalidad, impiden sacar el balón rápido y hacen el juego aburrido. Además, los técnicos planean hacer retroceder la línea de defensa diez metros de las formaciones estáticas; maul y scrum principalmente.
De paso, podrían legislar sobre la altura del placaje (¿abajo de la cadera?), para alentar el juego fluido. "Hay que ser prudentes antes de cambiar las reglas, ya que una modificación afecta a otros sectores", advierte el australiano Eddie Jones, consejero técnico de los sudafricanos. El Mundial-2007 abrió el debate.