ECOLOGíA
Con apoyo del Poder Ejecutivo

Se presentó en el Congreso un proyecto de ley de envases con inclusión social

Con la firma del presidente, esta iniciativa apunta a incentivar el reciclado de los envases, a dignificar el trabajo de los recicladores y la fabricación de productos más amigables con el ambiente.

Ley de envases
Ayer, se presentó en el Congreso un proyecto de ley de envases con la presencia de Máximo Kircher, y funcionarios oficiales. | Gentileza FACCyR

Ayer se presentó, en un acto en la Cámara baja del Congreso, un proyecto de ley de envases con inclusión social. Con la firma del propio Alberto Fernández, se busca que esta iniciativa pueda comenzar rápidamente su camino legislativo hasta convertirse en ley.  El acto contó con la presencia de Máximo Kirchner, titular del bloque de diputados del Frente de Todos, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Juan Cabandié, el viceministro de ambiente Sergio Federovisky, Jaqueline Flores de la FACCyR, y los diputados nacionales Federico Fagioli y Daniela Villar.

Este proyecto de ley, que apunta a incentivar el reciclado de los envases, la fabricación de productos más amigables con el ambiente, generar empleo en el sector del reciclado, y la trazabilidad de estos productos post consumo, se trata de una iniciativa de gestión de envases del Poder Ejecutivo, con gran apoyo del sector cartonero.

Parece que está de moda lo ecológico. Si bien es cool, buscamos algo que perdure y sea estable” -dijo Máximo Kirchner en el acto, donde confesó que él mismo está aprendiendo sobre la gestión correcta de los residuos –“Buscamos generar puestos de trabajo reales. No planes. Con esta ley buscamos potenciar, dignificar y cuidar el lugar donde vivimos.”

Detalles del proyecto

“El proyecto busca la implementación de una tasa ambiental para las empresas y productores que coloquen envases en el mercado, premiando a los que se hagan con materiales reciclables y sancionando a quienes no cumplan. Se propone crear el Sistema Nacional de Gestión de Envases (SINAGE), que tendrá el rol de implementación de Programas de fortalecimiento de la gestión de envases y la coordinación de los Sistemas de Gestión Local (SGL) que contemplen plan de gestión de los envases post consumo, objetivos y metas de recuperación y plan integración social de los trabajadores recicladores”, explicó Federovisky.

Lo recaudado con la tasa se utilizará para implementar Sistemas de Reciclado con Inclusión Social que permita mejorar las condiciones laborales de las más de 150.000 personas dedicadas a la actividad cartonera.

“El principal problema ambiental es la pobreza y desigualdad. Los empresarios saben que esto ya sucede en otros países”, sumó Daniela villar, diputada nacional que reconoció el recorrido cartonero de este último tiempo.

Por su parte, Jaqueline Flores, aseveró: “Sin Justicia social no hay Justicia ambiental. Es urgente que se trate esta ley y que se nos reconozca como las y los trabajadores que somos”.

Luego Cabandié habló de que hacía tiempo que este era uno de sus objetivos principales, también de los planes de erradicación de basurales a cielo abierto, como el caso de Luján y nombró el aumento de los residuos electrónicos, aunque no especificó ninguna acción en concreto frente a esta problemática en particular.

Marcha cartonera

La gran marcha cartonera

Mientras se desarrollaba el acto, fuera la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACCyR) se llevó adelante una multitudinaria movilización desde el Obelisco al Congreso de la Nación, en apoyo a la presentación del proyecto. “esta iniciativa busca instar a las empresas a hacerse cargo del costo de reciclado de los envases que colocan en el mercado y fortalecer el trabajo de los cartoneros y cartoneras”, aseguran desde FACCyR .

No es la primera vez que se presentaron proyectos de ley de esta clase. Desde el sector aclaran: “la diferencia es que muchas veces tuvimos que salir a plantarnos contra esos proyectos de ley redactados a medida de las multinacionales contaminantes”. En el país,  miles de personas se dedican a la actividad del reciclado en condiciones nefastas: en los propios basurales sin baños, agua, ni techo para cubrirse del sol o lluvia.