El Ejecutivo publicó ayer en el Boletín Oficial el presupuesto 2019 para Aerolíneas Argentinas, que prevé un rojo financiero de $ 4.674 millones. Por la tarde, el titular de la línea áerea, Luis Malvido, señaló a los medios cordobeses que el déficit podría ser casi del doble: unos US$ 200 millones.
En medio del conflicto con los gremios aeronáuticos, los datos de la línea de bandera también marcaron que antes del pago de deuda o impuestos, tiene un déficit operativo de $ 1.650 millones.
Si bien el titular de Aerolíneas reconoció la suba del déficit contra el Presupuesto, desde la empresa remarcaron que la cifra “va a estar muy por debajo de los valores del gobierno anterior, cuando la empresa no competía y tenía pasajes hasta un doble más caros que ahora”.
Una de las críticas de los gremios a la gestión actual se basa en la apertura de la competencia que generó la denominada “revolución de los aviones”. “En el período 2009 a 2015 los aportes estatales a la empresa promediaron US$ 678 millones, con su pico máximo en 2011 de US$ 860 millones”, indicaron desde la empresa.
Según la información presentada en el Boletín Oficial, para 2019 se prevé una operación en torno a los 350 vuelos diarios, lo que representa un 5% de crecimiento respecto de 2018, con un factor de ocupación promedio de 79%. En Córdoba, Malvido señaló a los medios locales y corresponsales que la empresa analiza cerrar rutas que no sean rentables. Es la misma advertencia que le habían hecho a los gremios el año pasado cuando intentaron renegociar los convenios.
En la explicación de los números de la empresa, el directivo señaló el impacto de la devaluación, que erosionó las tarifas en dólares que representan la mitad de los ingresos. También le apuntó a la “guerra de tarifas”. El Ministerio de Transporte habilitó la baja del precio sostén de las tarifas a pedido de las low cost como Flybondi. La suba de los costos internos también afecta a la línea de bandera, como el precio de los combustibles.
Por otra parte, Malvido señaló que unos US$ 70 millones corresponden a mantenimiento de aviones. “Las principales inversiones estarán orientadas a trabajos de mantenimiento de motores en la flota Embraer, derivados del ciclo de mantenimiento propio de esa flota”, sostiene en el Boletín Oficial.
En el balance, Aerolíneas reconoce que su participación en el mercado cayó al 65% por la entrada de nuevos jugadores pero marca que creció el número de pasajeros transportados un 9% porque el mercado creció 13%.
Empleo. En cuanto a la cantidad de trabajadores, uno de los anexos detalla que “se finalizó el 2018 con una dotación de 12.450 empleados, y se prevé una evolución tal que permita alcanzar nuevos y mejores indicadores de productividad durante 2019”. Otra planilla prevé cerrar el año con 150 empleados menos: estiman tener 12.308 en la nómina.
“El movimiento de personal es natural en una empresa de estas dimensiones, las oscilaciones tienen que ver con los programas de jubilaciones previstas”, según fuentes de Aerolíneas.