Este viernes vencen US$ 503 millones en bonos globales que marcarán la entrada en un 'default selectivo' si no se pagan. También vence el plazo para negociar con los bonistas, que se extendió hasta el 2 de junio.
De recorrida por Santiago del Estero y Tucumán, el presidente Alberto Fernández, buscó desdramatizarlo. “Leo en los diarios que corremos el peligro de caer en default mañana y yo me preguntó por qué mienten así. Si estamos en default desde hace meses, desde antes de diciembre que estamos en default, solo que no lo escriben, solo que lo ocultan”, reflexionó el mandatario.
Las calificadoras de deuda ponen a la Argentina en el área de riesgo y en los próximos días marcarán ese default selectivo. Los indicadores como el riesgo país o la volatilidad del dólar lo marcan. Pero la jugada del Gobierno es restarle importancia al incumplimiento de mañana. Y no sólo el oficialismo. Algunos acreedores como Hans Humes, de Greylock, señalaron que, en rigor, el país puede entrar "en algún tipo de default", pero consideró que si eso pasa mañana, "se podrá levantar". De lo que no se trata es de un default como el de 2001, cuando se declararon en cesación todos los pagos.
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“No vamos a someter a la Argentina a nuevos compromisos que no podamos cumplir", agregó el mandatario. La semana pasada llegaron contraofertas de los grupos de bonistas que el ministro de Economía, Martín Guzmán, analiza. Y prepara la respuesta. Para eso, prorrogarán la fecha de la oferta del canje hasta el 2 de junio, según indicaron fuentes al tanto de la negociación. En las próximas horas se enviará la orden para prorrogarlo a la Securities Exchange Commission (SEC), la comisión de valores de los EE.UU. El Gobierno busca llegar a un acuerdo con la condición de "sustentabilidad" que marca el ministro: que pueda pagarse y no obligue a una nueva reestructuración en el futuro.
"Quiero que el mundo nos vea como un país honorable que cumple sus compromisos y por lo tanto no vamos a hacer más que lo que debamos hacer para que los compromisos que asumamos con nuestros acreedores no signifiquen una nueva postergación de nuestro pueblo”, afirmó Fernández.
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Así lo señaló durante un discurso que brindó en un acto en la Escuela del Centenario junto al gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora. Allí estuvo acompañado por los ministros de Interior, Eduardo de Pedro; y de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; y el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello, Fernández aseguró que ese fue el compromiso que asumió en la campaña, con quienes recorrió también las instalaciones de la empresa Scania en Tucumán.
CP