La presentación en concurso de acreedores de la empresa Ribera Desarrollos, del empresario Carlos De Narváez, hermano del ex diputado Francisco, va camino a convertirse en la pelea de negocios del verano. No solo porque incluye una deuda con bancos y financieras por más de US$ 100 millones y ventas anticipadas de metros cuadrados que no se construyeron por otro tanto en el Complejo Al Río, en Vicente López, donde tienen oficinas grandes multinacionales, sino también porque entre los afectados hay hombres del ámbito deportivo y allegados a los negocios del ex ministro de Planificación Julio De Vido, entre otros.
De acuerdo con un paper oficial del emprendimiento de 16 hectáreas frente al Río de la Plata al que accedió PERFIL, a fin del año pasado se habían vendido unos 25.734 metros cuadrados sobre el total de 36.482 vendibles del proyecto Torre Norte, en el otro extremo del Complejo Al Río, donde hoy solo hay un pozo.
De los que firmaron boleto, los pisos 2, 3, 4 y 5 habían sido adquiridos por Edenor, del grupo Pampa Energía, propiedad del empresario Marcelo Mindlin. En total, son unos 10.055 metros cuadrados que suscribió en noviembre de 2015, en una inversión que se calcula en alrededor de 50 millones de dólares. Los pisos 8, 9 y 10 habían sido suscriptos por el Banco Comafi en noviembre de 2014, por unos 4.412 metros cuadrados, por una inversión cercana a los US$ 20 millones. El tercer mayor comprador fue la aseguradora Mercantil Andina, que había adquirido 2.942 metros cuadrados en septiembre de 2014, en lo que iban a ser los pisos 11 y 12.
Luego, siempre según el documento con el que el Complejo Al Río intentó tentar compradores, aparece indicado “J.J. Levy”, del Grupo Núcleo, iniciales y empresas que coinciden con las de José Levy, que está siendo investigado por el juez Aguinsky por negocios vinculados a Venezuela durante la era De Vido. Se indica allí que había comprado los pisos 13 y 14, unos 2.638 metros cuadrados, en diciembre de 2015, una inversión de entre US$ 8 y US$ 10 millones. Y más adelante, aparece como inversor “L. Pirosanto”. PERFIL no pudo confirmar si se trata de Lisandro Pirosanto, el ex contador de Claudia Villafañe, la ex esposa de Diego Maradona. En este caso, aparece una inversión de 1.441 metros en noviembre de 2016, en el piso 15.
Por otro lado, según publicó Iprofesional esta semana, el Grupo Cohen, que estructuró una obligación negociable por US$ 15 millones para el proyecto, le inició una demanda penal por estafa al empresario. Y podría no ser el único en los próximos días.
