Desde hace algunos años las personas que analizan la educación primaria y secundaria suelen coincidir en un mismo diagnóstico: los resultados y el nivel general vienen empeorando. Las últimas pruebas Aprender y PISA dan cuenta de este fenómeno negativo. A raíz de esta problemática y preocupados por la deserción escolar, dos jóvenes universitarios empezaron a pensar tres años atrás de qué manera crear un emprendimiento que fuera sustentable y que contribuya a mejorar el andar de los chicos en la escuela: de esta forma surgió Blended, un app que en la actualidad es utilizada por alrededor de 400 colegios y que permite una mayor conexión entre padres y autoridades escolares.
“Hoy una de las variables más determinantes en relación a los resultados que tienen los chicos en el colegio es cuán involucrados están los padres en la educación”, resume Nicolás Giménez, uno de los fundadores de este emprendimiento, quien explicó a PERFIL que los inversores que decidieron apostar por la plataforma no solo les auditan métricas de negocios (ingresos, por ejemplo), sino también métricas de impacto.
Blended comenzó en 2016 como una herramienta de comunicación que era ofrecida a las escuelas. Una vez que las instituciones adoptaban esta plataforma les informaban a los padres que podían descargarla desde sus celulares y que allí iban a encontrar información que comúnmente se volcaba en el cuaderno de comunicaciones. Si bien los colegios que usan Blended siguen teniendo el cuaderno de comunicaciones como documento oficial, la app empezó a brindar información de manera más dinámica y amigable para los padres y, por ende, comenzó a ser bien recibida.
Las barreras que las escuelas aún no logran derribar
La startup creada por Giménez y su socio empezó a lograr capilaridad a partir del boca en boca: “Lo que hicimos para pasar esa primera etapa era proveer el servicio de manera gratuita. ‘Probalo en algún curso’, les ofrecíamos a los directores. En primer lugar, Blended se usaba para las típicas notitas: ‘mañana es el acto’, o bien en jardín de infantes, ‘mañana hay que traer tapitas’. Lo innovador era que podían subir fotos y videos. Conclusión: teníamos unos niveles de uso increíbles por parte de los padres”.
Con el correr del tiempo, las escuelas empezaron a solicitar otras funcionalidades: “Nos decían ‘los papás están re contentos, ahora les quiero mandar las notas’. Ahí empezamos a agrandar nuestro equipo y desarrollamos un módulo de calificaciones. Entonces, los docentes podían cargar la nota en la plataforma, esas notas se subían el sistema, se procesaban y cuando el colegio quería se los mandaba a los padres. También se empezaron a poder cargar faltas y avisarles a los padres de las mismas”, señaló Giménez
Luego de un año de proveer el servicio en forma gratuita durante 2016, Blended empezó a ser comercializada al año siguiente, a partir de las recomendaciones entre las escuelas. Asimismo, en una segunda versión se agregó un módulo para que los directivos de las escuelas pudieran usar plataforma para realizar gestiones internas de las instituciones. “En los próximos meses vamos a largar una tercera versión de la app, que permite integrar lo que existe con Blended con otras aplicaciones que usen las escuelas (como Google Classroom) o la facturación, por ejemplo”, añadió el joven emprendedor de 28 años.
“El secreto fue siempre desarrollar la plataforma dentro de los colegios y con los directivos. Escuchándolos. Cada colegio tiene una customización con los módulos que requiere”, amplió.
En distintos tramos de la charla con PERFIL, Nicolás Giménez reiteró su agradecimiento a las primeras escuelas que creyeron en ellos. “En educación cuesta mucho innovar y tomar una decisión. Nadie quiere ser el primero. Nadie quiere tomar riesgos. Hoy por hoy, en perspectiva, los entiendo”. Él mismo reconoce que, al principio, la aplicación tenía errores que se fueron puliendo con el tiempo.
En la actualidad, a más de tres años de su lanzamiento, Blended brinda servicios a escuelas ubicadas en 14 provincias. Y, si bien por el momento están trabajando con instituciones privadas, las mismas son de características muy diversas: desde colegios tradicionales hasta establecimientos 100% subsidiados en barrios muy humildes.
Además, en pocos años comenzó a llegar el reconocimiento internacional. En abril de este año fue distinguida en Suiza como “la mejor startup del mundo”, en un concurso del cual participaban 8000 compañías de base tecnológica. Y, por otra parte, empezó a haber pedidos de clientes desde otros países. “Ya trabajamos con colegios de Colombia y Paraguay y vamos a abrir una oficina en Perú”.
En la actualidad, este sueño que comenzó con dos estudiantes de ciencas económicas que querían mejorar la educación se convirtió en un emprendimiento que emplea a 18 personas y que obtuvo inversiones, incluso, de un fondo de Silicon Valley. Pero también, lo que más busca destacar uno de sus fundadores, en un equipo que trabaja palmo a palmo con directores de escuelas: “Hace poco un colegio de Oberá, Misiones, viajó a Brasil por una competencia deportiva y el director imprimió en las remeras el nombre Blended y nos aclaró que no quería cobrarnos nada, sino que quería difundir nuestro proyecto”, mencionó, emocionado,
Modelo de negocios. El servicio que brinda esta compañía se basa en el sistema SaaS (Software as a Service): se les cobra a las escuelas un monto según el número de alumnos que tengan.
