El Fondo Monetario Internacional (FMI) redobló hoy la presión sobre la Argentina para lograr un acuerdo sobre la pendiente revisión del artículo IV pero el ministro de Economía, Amado Boudou, rechazó esa posibilidad.
"No vinimos a buscar un acuerdo por el artículo IV, eso no está en nuestra agenda aquí en Washington", indicó el jefe del Palacio de Hacienda.
El ministro formuló declaraciones en la capital estadounidense -que fueron reproducidas aquí- donde participa de la Asamblea Anual del FMI.
En un principio, el subdirector gerente del FMI, John Lipsky, se manifestó confiado en que "en un tiempo razonable podamos acordar la planificación de un nuevo artículo IV", según informó aquí la Agencia France Press (AFP).
Consultado en rueda de prensa por la tarde, Boudou insistió en que la Argentina no admitirá una auditoría que implique condicionamiento. "Un artículo IV en este contexto se convierte en un problema porque este gobierno no aceptará condicionamientos de política económica", enfatizó el ministro.
No obstante, inmediatamente recalcó que "la Argentina es parte del FMI" pese a no estar de acuerdo con que se realice la revisión.
En ese sentido admitió que podría lograrse un acercamiento "mientras se trate de una evaluación sólo de nivel técnico y con el volumen de información necesario".
La Argentina pretende que el FMI no realice consideraciones ni recomendaciones sobre su política económica, algo que acompaña a todas las evaluaciones del artículo IV.
El ministro afirmó que para la Argentina las negociaciones con el Club de Paris y con el FMI "son temas separados" y minimizó el impacto financiero que puede tener la falta de un acuerdo con estas entidades.
En ese sentido consideró que siempre fueron "más perjudiciales" para el país las políticas la implementación de las políticas del FMI.
"La dificultad es la historia del vínculo entre el FMI y la Argentina que arranca desde la época de (el ministro de Economía de la dictadura, José Alfredo) Martínez de Hoz”, graficó Boudou.
El "artículo IV" es el proceso de evaluación de las cuentas de un miembro del Fondo para contribuir a la estabilidad monetaria y financiera internacional, y es un proceso de vigilancia mutua al cual todos los estados se obligan cuando adhieren al Fondo.
Argentina dejó de aceptar las revisiones del Fondo en 2006, tras cancelar la deuda que mantenía con la entidad por 9.500 millones de dólares.
Fuente: DyN
