El Gobierno se está enfrentando cada día más a la desconfianza del mercado, que se ha traducido en las últimas semanas en licitaciones de deuda en las que el Ejecutivo pudo captar no más allá del 75 por ciento de lo que se pretendía tomar como financiamiento para cancelar vencimientos en pesos. Así se “agiganta la figura de la emisión monetaria” y de esta forma, se ejerce más presión inflacionaria hacia el mediano plazo.
Diversos analistas y operadores del mercado vienen advirtiendo en los últimos días que el Poder Ejecutivo está recurriendo cada vez más a títulos de deuda en pesos con plazos muy cortos, como una forma de generar más adhesión de los inversores, y con una jugada muy audaz: colocar bonos contra encajes, algo sumamente riesgoso.
Pero aún así, el Gobierno no logra captar el ciento por ciento de los montos que se estimaron en las últimas licitaciones y una prueba concreta fue lo que pasó el último viernes, donde la Secretaría de Finanzas obtuvo financiamiento por sólo $ 71.374 millones en la última licitación de agosto, cuyo vencimiento se ubicaba en torno a los $ 93.000 millones.
Política económica: tsunami de Leliqs
En la mañana de este lunes, en el mercado consideraron que esas cifras muestran otra floja operación de deuda que encaró el Gobierno. De ese modo, finalizó el mes con un ratio de refinanciamiento por debajo del 100% por primera vez en 14 meses.
Particularmente, en la tercera licitación de agosto se ofrecieron cinco instrumentos de deuda pública: tres letras a descuento con vencimiento el 30 de noviembre, 31 de diciembre de 2021 y 31 de enero de 2022, una letra a tasa variable con vencimiento el 30 de noviembre de 2021, y una letra en pesos ajustada por CER con vencimiento el 28 de febrero de 2022.
Para todos los casos se trató de reaperturas de instrumentos ya existentes.
Se recibió un total de 704 ofertas por un total de $76.262 millones, lo que se tradujo en un total de valor efectivo adjudicado de $71.374 millones.
Del total colocado, el 60% fue en instrumentos a tasa fija, un 32% ajustable por CER y un 8% a tasa variable.
Qué dicen los economistas
Para el economista Juan Ignacio Paolicchi, el "problema de la mala licitación del Ministerio de Economía es que se van agotando los límites de financiamiento monetario".
"Ahora no sólo financian el déficit, sino los pagos ´netos´ de deuda. La maquinita no es ilimitada y, por ende, el déficit tampoco", subrayó.
Por su parte, Portfolio Personal indicó que a diferencia de julio, la mayor parte de los vencimientos de agosto se concentraron en la primera semana del mes y en septiembre, la antesala de las elecciones legislativas, los mayores vencimientos en lo que queda del año.
En cuanto a esta situación, la economista y catedrática Diana Mondino recalcó que “esto demuestra la desconfianza de los inversores, de los ahorristas, sobre el panorama económico que ofrece el país”.
“Cada día la desconfianza es mayor porque saben que lo que no se está cubriendo va acelerar más la emisión monetaria y por lo tanto, los efectos sobre la inflación serán más duros”, enfatizó.
Para Mondino, “la actual gestión reitera que no va a promover una reducción del gasto público, por lo tanto lo que no se pueda cubrir con deuda se lo hará con emisión. Lo peligroso de todo esto es la gran cantidad de pesos que en este momento no tienen hacia dónde ir como opción de inversión”.
Alertan por endeudamiento en pesos y más emisión
Por su parte, el consultor y especialista del mercado, Christian Buteler, “todo lo que no se puede cubrir con deuda se va a tener que hacer emitiendo pesos, y lo que es más grave, es que eso ya se viene haciendo desde hace mucho tiempo, cubriendo también gastos corrientes. Esa emisión va a impactar sobre el tipo de cambio y especialmente en la inflación”.
“Lo que yo veo como muy peligroso es que el Ejecutivo haya puesto como incentivo los encajes bancarios, es decir, que se puedan suscribir una serie de bonos con los encajes. Antes, los encajes estaban en poder del Banco Central y ahora, una parte, pasan a manos del Tesoro para cubrir gastos corrientes”, alertó.
E inmediatamente el especialista enfatizó que “esto baja la calidad en cuanto a los niveles de seguridad de los depósitos”.
Debate sobre la deuda
Además, esta situación de la reticencia de los inversores a prestarle al Estado se da en medio de una creciente polémica por el tema de la deuda, en medio de la campaña electoral.
Desde la oposición aseguran que la gestión del presidente Alberto Fernández tiene un ritmo de deuda superior al de Mauricio Macri y sostienen que desde diciembre de 2019 hasta junio de este año la misma creció en casi 31 mil millones de dólares.
En el gabinete económico consideran que ese planteo es absolutamente “inaudito e incoherente”. “Es insólito lo que está haciendo Juntos por el Cambio al elegir discutir responsabilidades de un proceso de endeudamiento entre 2016 y 2019 que tanto daño le hizo a nuestro país”, expresó el ministro de Economía Martín Guzmán, al cierre de la semana pasada, en el Encuentro Producción, Economía y Futuro.
El titular del Palacio de Hacienda agregó que “con el endeudamiento insostenible de JxC se hipotecó las posibilidades del país para salir adelante y hoy estamos trabajando para resolver los gravísimos problemas que nos dejaron”.
LR CP